El cambio climático y sus consecuencias, cada vez más graves, para el planeta es un tema cuya preocupación va en aumento. En ese marco, la ONU se pronunció al respecto y realizó una alarmante advertencia.
Además, dejó un contundente mensaje para las principales potencias.
El secretario general de la ONU, António Guterres, alertó que «la bomba de relojería del cambio climático no se detiene» por lo que le pidió a las naciones más adineradas que disminuyan sus emisiones lo antes posible.
En esa línea, remarcó que «el ritmo de aumento de la temperatura en el último medio siglo es el más alto de los últimos 2.000 años» y aseguró que «las concentraciones de dióxido de carbono están en su punto más alto en al menos 2 millones de años».
Por lo tanto, sin dejar lugar a dudas, aseveró que «la bomba de relojería climática está haciendo tictac«.
En un mensaje grabado, Guterres definió al sexto «informe de síntesis» elaborado por el Grupo Intergubernamental de Expertos respecto al Cambio Climático (IPCC) de la ONU como «una guía de supervivencia para la humanidad» y nuevamente puso el foco en los países más ricos: los llamó a comprometerse con las emisiones netas cero lo más temprano posible, cerca del 2040.
El estudio hace un resumen de las conclusiones de tres análisis desarrollados por expertos publicadas entre 2021 y 2022 que investigan la ciencia, los impactos y la mitigación del cambio climático a fin de brindar claridad a los dirigentes políticos al momento de tomar nuevas medidas.
Además, podrá usarse como guía para un «balance» mundial del cambio climático que se realizará este año, en el cual los países estudiarán lo que se ha hecho hasta esa fecha. A raíz del Acuerdo de París de 2015, los países también tienen que actualizar sus compromisos climáticos para el 2025.
«Tenemos las herramientas para evitar y reducir los riesgos de los peores impactos de la crisis climática, pero debemos aprovechar este momento para actuar ahora«, sostuvo, John Kerry, enviado especial de EEUU para el clima.
Acorde con el IPCC, las emisiones deben disminuirse a la mitad para la mitad del 2030, si se quiere que el mundo tenga alguna posibilidad de limitar el incremento de la temperatura a 1,5 grados centígrados por arriba de los niveles preindustriales, un objetivo que se encuentra en el Acuerdo de París.
«Si actuamos ahora, todavía podemos garantizar un futuro sostenible y habitable para todos», aseveró Hoesung Lee, titular del IPCC.
(Con información de la Agencia Reuters)
