La cantidad de ataques de tiburones no provocados en todo el mundo aumentó considerablemente en 2021, según un informe publicado por el Archivo Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF) de la Universidad de Florida.
El informe ISAF 2021 , publicado el 24 de enero, mostró que hubo 73 mordeduras de tiburón no provocadas en humanos el año pasado, un aumento del 28 por ciento en la cifra de 2020 de 57.
El número de muertes se mantuvo relativamente estable, con 11 registradas en 2021 en comparación con 13 en 2020.
Los científicos detrás del informe especulan que el cambio de reglas y actitudes hacia la pandemia de COVID-19 podría estar detrás de las cifras.
«El año pasado, especulamos, y no lo sabemos con certeza, que la razón por la que hubo un número más bajo fue porque había menos personas en el agua debido a los cierres», Gavin Naylor, director del Programa de Florida. para Shark Research, coautor del informe, dijo a Newsweek . “Ahora el número volvió a subir porque la gente se hartó y volvió al agua.
«Tuvimos una pequeña caída el año pasado y parece que estamos subiendo a números normales este año», dijo con respecto a la cantidad de mordeduras de tiburón no provocadas en humanos.
El informe de la ISAF mostró en qué parte de la Tierra se estaban produciendo la mayoría de los ataques. El archipiélago relativamente pequeño de Nueva Caledonia en el Pacífico Sur reportó dos ataques fatales de tiburones. Este es solo uno menos que Australia , el país que a menudo encabeza las cifras de mortalidad de tiburones debido a la prevalencia de especies más grandes, como los grandes tiburones blancos y los tiburones tigre.
En ambos casos, la prevalencia de estos tiburones más grandes y peligrosos y la popularidad del turismo y los deportes acuáticos como el surf pueden crear una combinación rara pero a veces fatal.
«Hay mucho turismo en Nueva Caledonia, un destino para muchos turistas franceses que alienta a muchas personas más deportistas a hacer cosas como el kitesurf», dijo Naylor. «Y tienen bastantes tiburones tigre allí y eso está superando su peso en términos de número de muertes.
«Vemos que en lugares que son montes marinos, como Reunión, Hawái o Nueva Caledonia, en estas islas en un sistema pelágico, hay algunos tiburones bastante grandes. Tiburones tigre y tiburones toro, por ejemplo. A menudo tienen hermosos corales arrecifes que atraen a muchos turistas y tienes estos grandes animales en el agua haciendo deportes recreativos y la probabilidad de una interacción entre los dos aumenta.
«Australia, por ejemplo, tiene más muertes porque hay muchos tiburones blancos ahí abajo, cerca de la superficie, que se alimentan de focas. Y la gente allí está surfeando… y cuando un gran tiburón blanco te muerde en la pierna, puede cortarte su arteria femoral y, a menudo, puede ser fatal a menos que reciba atención muy rápido».
Los ataques en estas áreas difieren de los de la costa atlántica de los EE. UU., donde todavía hay muchos surfistas y personas que se sumergen en el agua, pero menos tiburones más grandes o más peligrosos, como los tigres y los tiburones blancos.
Sin embargo, hubo más picaduras en los EE. UU. el año pasado (47) que en cualquier otro país. Eso fue un 42 % más alto que los 33 ataques de tiburones registrados en EE. UU. en 2020, y representó el 64 % del total mundial.
La mayoría de los ataques de tiburones en EE. UU. ocurrieron en Florida, con 28 mordeduras registradas. En los EE. UU. en general, solo hubo un ataque fatal de tiburón.
«Las muertes están absolutamente, muy fuertemente correlacionadas con el tamaño del tiburón, y eso depende de dónde estés surfeando», dijo Naylor. «No tenemos demasiados tiburones blancos cerca de la costa en Florida, por lo que no tenemos muchas muertes en Florida y, sin embargo, lideramos el mundo con mordeduras porque hay muchos tiburones punta negra más pequeños cerca de la costa». y hay mucha gente que surfea».
En términos del futuro de los ataques de tiburones, un lugar que podría ver un aumento en los ataques es el otro extremo de la costa atlántica de Estados Unidos en Nueva Inglaterra.
Después de la aprobación de la Ley de Mamíferos Marinos en 1972, el número de focas frente a la costa del Atlántico Norte ha respondido y aumentado constantemente, al igual que los avistamientos de tiburones blancos.
Naylor dijo que espera que aumenten los incidentes de ataques de tiburones en el área, a pesar de que la cantidad de tiburones en todo el mundo está disminuyendo vertiginosamente en medio de la pesca industrial.
«Vemos más tiburones blancos en Nueva Inglaterra», dijo. «Vemos que muchas de las mordeduras de los tiburones blancos a las personas no las hacen estas hembras de 17 pies, sino adolescentes de 13 pies. La mayoría de las mordeduras son de animales ingenuos que tienen más probabilidades de cometer errores. Si tienes 40 años -Tiburón blanco viejo que ha estado dando vueltas un poco, sabes la diferencia entre una foca y un surfista. Pero si solo eres un tiburón blanco de cuatro años y estás emocionado por las focas en el área, y empujado por una ola hacia donde están los humanos en el agua, es más probable que cometas un error.
«Creemos que es muy probable que, a largo plazo, aumente la incidencia de mordeduras en Nueva Inglaterra en las manos o los dientes de los tiburones blancos. Estos son animales grandes y habrá una mayor proporción de ellos que serán fatal en comparación con los tiburones de punta negra.
«Así que puedo imaginar que en el futuro, lamentablemente, habrá más muertes».
Publicado en cooperación con Newsweek
