La brutal ola de frío que congeló Texas no solo ha perjudicado a las personas que no estaban preparadas, sino que también tomó por sorpresa a las tortugas.
Miles de tortugas marinas que no están acostumbradas a las bajas temperaturas han estado apareciendo en las playas de South Padre Island, frente a la costa sur de Texas. Los voluntarios han llevado a unas 4.700 a un centro de convenciones, donde mantienen a los reptiles en contenedores para liberarlos cuando el agua del mar esté más cálida.
«Es un evento sin precedentes«, declaró Wendy Knight, directora ejecutiva del centro de investigación y conservación Sea Turtle Inc, que ha estado dirigiendo el esfuerzo. Knight dijo que normalmente solo entre 100 y 500 tortugas llegan a las playas del sur de Texas cada invierno boreal.
Los voluntarios colocan cuidadosamente a los animales en un carrito; el piso del recinto está cubierto de tortugas de todas formas y tamaños.
Ed Caum, director ejecutivo de la Oficina de Convenciones y Visitantes de South Padre Island, dijo que los reptiles estaban como «aturdidos por el frío». En esta condición los animales de sangre fría de repente exhiben reacciones hipotérmicas como letargo e incapacidad para moverse cuando la temperatura en el ambiente que los rodea desciende.
«Los hemos traído al centro de convenciones para que recuperen sus temperaturas centrales», señaló Caum, quien también relató cómo se restablecieron los suministros de energía y agua del centro durante la noche. Millones de texanos se han quedado sin calefacción debido a cortes de energía en el estado, provocados por una ola de frío en la que las temperaturas del aire y del agua han caído muy por debajo de los niveles típicos.
«Nos hemos expandido hacia abajo en ambas alas. El calor está volviendo a subir en el pasillo», comenta Caum rodeado de tortugas tendidas de un extremo a otro. «Hemos recolectado muchas, ahora trataremos de salvarlas».
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