La combinación de ejercicio físico con atención al entorno natural gana cada vez más colaboradores. Es así como nace este peculiar deporte que cada día suma más practicantes.
Se llama plogging, un deporte que une ejercicio con la limpieza de desperdicios. Quienes lo llevan a cabo, aseguran que lo promueven con conciencia ambiental. Se practica tanto en zonas urbanas, como en espacios naturales tales como playas o montañas.
Esta actividad nació en Suecia, en la ciudad de Estocolmo; pero su difusión por las redes e Internet ha hecho que conquiste al público mundial y por eso en muchos países ya existen asociaciones de plogging.
¿Qué es exactamente el plogging?
Se lo define como la actividad de correr, o trotar, mientras se van recogiendo los desperdicios del suelo. Actualmente hay rutas enteras, grupos que acuerdan circuitos para entrenar el cuerpo, a la vez que hacen una excelente labor por el ambiente. Este deporte combina varias acciones corporales. Como primera instancia, el acto de correr y quemar calorías. No obstante, se suma que hay que hacer sentadillas o agacharse. De hecho, muchos consideran al plogging como un excelente método para bajar de peso.
No se necesita mucho para practicarlo, es una actividad sencilla y de bajos costos. Solo se requiere: zapatillas deportivas, guantes y una bolsa para acopiar los desperdicios levantados del suelo.
Es una iniciativa muy valiosa porque se encadena a otras que estimulan la comunión entre el deporte y el cuidado del ambiente. Muchos países de América Latina se han incorporado a esta movida. En el caso argentino, hay asociaciones que organizan esta actividad en varias localidades: Neuquén, Santa Fe, Chaco, Corrientes, Río Negro, Tucumán y, por supuesto, en Buenos Aires.
En otras naciones, el plogging va sumando voluntades. Se ha visto esta actividad en Río de Janeiro y en Acapulco; al igual que en urbes europeas como Madrid o Barcelona.
Publicado en colaboración con www.bioguia.com