Hoy, martes 18 de octubre, es el Día Mundial de la Protección de la Naturaleza y el Foro Mundial para la Naturaleza advirtió que la cantidad de animales vertebrados (mamíferos, reptiles, aves, anfibios, peces) de todo el mundo bajó un 69%.
En su informe «Planeta Vivo», la entidad indicó que si bien América Latina y el Caribe, es una de las regiones con mayor biodiversidad a nivel global, es también donde se contabiliza la disminución regional más elevada, ya que, llega al 94% .
Además de la pérdida de los vertebrados, el estudio señaló que «una de las poblaciones evaluadas del delfín rosado del Amazonas sufrió una disminución del 65% debido al aumento de la pesca selectiva, así como a las presiones impuestas por el rápido crecimiento de la población humana» y añadió que «la mitad de los corales del planeta se ha perdido y ello tiene un impacto negativo en cadena, pues albergan a un cuarto de todas las especies marinas y dan soporte a una compleja cadena trófica que incluye a los humanos». «Mientras que la abundancia mundial de 18 de las 31 especies de tiburones y rayas oceánicas se ha reducido un 71% en los últimos cincuenta años«, indicó.
Ante este panorama, la organización llama a los gobiernos, a las empresas y a la sociedad en general a llevar adelante, de forma urgente, medidas que ayuden a cambiar la situación. También deja en claro que el mundo enfrenta una doble emergencia provocada por el ser humano, la crisis del cambio climático y la pérdida de biodiversidad, que amenazan el bienestar de la población global.
Luis Germán Naranjo, Director de Conservación de WWF Colombia, explicó que «de la misma forma que es necesario disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, es urgente revertir la pérdida de biodiversidad y el declive y degradación de los ecosistemas». y recalcó que «el informe nos da información esencial para restablecer nuestra rota relación con el mundo natural y muestra lo apremiante que es integrar principios de justicia ambiental y social en el centro de los cambios».
Es por eso, que adelantó que «en el marco de la próxima conferencia de biodiversidad COP15 de la ONU, es prioritario impulsar un plan global que, como el Acuerdo de París, tenga como meta revertir las pérdidas y mejorar la salud de las poblaciones silvestres y los ecosistemas».
Para concluir, Jordi Surkin, Coordinador de Conservación de WWF en Latinoamérica, hizo hincapié en que «el informe deja claro que los gobiernos, empresas, así como el público en general, deben cambiar los valores y normas que definen nuestra relación con la naturaleza porque éstos tienen un sesgo que conduce a la degradación, mediante prácticas destructivas que dañan los océanos, selvas y humedales del mundo» y por lo tanto, recalcó que «urge un enfoque transformador que también tome en cuenta otros factores que contribuyen a la pérdida de la biodiversidad y que incluyen los financieros, como la especulación; los económicos, como centrarse en el crecimiento del PIB; los socioculturales, como los actuales patrones de producción y consumo; o aquellos relacionados con una gobernanza deficiente».