Un informe del Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano sostiene que las cuentas fiscales de la Argentina están “empeorando” en los últimos meses.
De acuerdos a sus números, el Resultado Financiero (RF, que resulta de la diferencia entre ingresos y egresos de las arcas públicas, volvió a marcar en diciembre de 2022 un saldo negativo: fueron $685.000 millones, que se suman a los $532.000 millones negativos de noviembre.
Respecto a los ingresos, el director del CENE, Víctor Beker, afirmó que el panorama fue positivo por los efectos del “dólar soja”. “En materia de ingresos, se destacó el avance debido a la recaudación del impuesto a las ganancias, fruto del ingreso de la tercera cuota del pago a cuenta extraordinario realizado por las sociedades. También hubo una importante participación por parte de los derechos de exportación, merced a la liquidación del complejo sojero realizada durante el mes, en el marco del Programa de Incremento Exportador”, explica en un comunicado.
En tanto, en materia de gastos, hubo un efecto marcado por los salarios. “Se destaca el aumento verificado en materia de remuneraciones, atribuible al pago del medio aguinaldo”.
Con este escenario, concluyó: “No obstante el retroceso de diciembre, cabe señalar que el déficit primario alcanzó para todo el año un 2,4% del PBI, por debajo del acordado con el FMI, del 2,5%. Ello fue producto de una reducción del gasto primario real a lo largo del segundo semestre de 2022, acorde con la información suministrada por el Ministerio de Economía, que reemplazó a la Secretaría de Hacienda en esa función”.
Según Chequeado.com, en 2022 se acumuló un “rojo” primario de $1,95 billones, y el déficit financiero fue de $3,44 billones.