La visibilidad desde el timón hasta la proa del barco queda reducida a meras miniaturas. Con 300 metros de eslora, es poco lo que puede hacer el capitán sin el acompañamiento indicado, incluso conociendo cada rincón tras 10 años al frente de este buque. De ahí que, para las maniobras más complicadas como la entrada y salida de la terminal, cuenta no sólo con la tripulación de 45 hombres y mujeres a su servicio, sino con la ayuda de Prefectura que cierra completamente el tránsito del Paraná de las Palmas y con un remolcador que le permite girar en 180 grados para dirigirse al Río de La Plata.
Todas estas complicaciones se justifican por la capacidad de almacenamiento de este barco. Gracias a su tamaño, el Expedient puede recibir 150 mil metros cúbicos de Gas Natural Licuado (GNL) que convertirá nuevamente en estado gaseoso para inyectar a la red y abastecer aproximadamente el 15% de la demanda argentina.
Para su comodidad, no son muchas las veces que el Expedient tiene que salir de esta terminal regasificadora ubicada estratégicamente en la localidad de Escobar por su cercanía con la gran demanda residencial del AMBA, el cordón industrial que va desde el norte del GBA hasta Rosario y la decena de Centrales Termoeléctricas de la zona. Los que sí tienen que hacerlo son los barcos que, durante el invierno, llegan cada tres días a reponer este insumo tan cotizado hoy en día en el mundo.
Tras un proceso muy complejo donde se reduce el volumen del gas natural unas 600 veces para poder transportar más, estos buques traen el GNL a unos 163 grados bajo cero y lo descargan en el Expedient en unas 36 horas, de las cuales 12 solamente se dedican a la conexión y desconexión de mangueras, uno de los elementos que más celosamente se cuidan en la embarcación.
En su última etapa de transformación, el GNL es calentado a 7 grados mediante un intercambiador de calor de 15 metros en forma de serpentina y recién ahí es convertido a gas natural para inyectar 22 millones de metros cúbicos al día a la red, el doble de lo que podrá transportar el Gasoducto Néstor Kirchner en su primera etapa.
El Expedient puede recibir 150.000 metros cúbicos de Gas Natural Licuado (GNL) que convertirá nuevamente en estado gaseoso para inyectar a la red y abastecer aproximadamente el 15% de la demanda argentina (Foto: EnergíaOnline)
A pesar de que dicho caño ampliará la capacidad de transporte de gas del país en 44 Mm3/d una vez terminadas todas sus etapas, la idea inicial es mantener operativa tanto esta terminal de Escobar como la de Bahía Blanca, considerando que son el vehículo más eficiente para garantizar el suministro durante el pico invernal. Sobre todo, teniendo en cuenta que Bolivia envía cada vez menos fluido.
Aún así, en paralelo, esta misma empresa tiene un ambicioso proyecto junto a TGS para construir una planta de licuefacción y realizar exactamente el proceso inverso.
“Hoy no están dadas las condiciones para exportar 365 días del año porque el gasoducto va a estar para cubrir la demanda, y en la demanda de pico aún se va a tener que seguir importando. Se piensa en un proyecto de exportación fuera del invierno por esos 8 a 9 meses para que los productores puedan tener una venta de gas estable en todo el año”, nos cuenta la Gerenta General de Excelerate y Vicepresidenta Regional, Gabriela Aguilar.
Luego de evaluarlo minuciosamente, la decisión de inversión se anunciará el primer trimestre del 2023, con la novedad de que ya no sería un solo módulo de 4Mm3/d sino un módulo y medio o dos. Una de las claves pasa por el aumento de los costos en dólares que tornaron obsoleto el primer presupuesto de 400 millones de dólares por módulo calculado antes de la pandemia.
Aún así, en la industria hay optimismo por la oportunidad que desencadenó la guerra en Ucrania, la búsqueda de nuevos proveedores por parte de Europa y la construcción de numerosas plantas regasificadoras en Brasil, con las cuales habría una mayor competitividad logística por la menor distancia entre puertos.
Una señal positiva será la presentación de un marco normativo específico para promover la exportación de GNL que anunciará la Secretaría de Energía durante este mes, según indicó a este medio Flavia Royón. De concretarse, la puesta en marcha de la planta demandará unos 30 meses y estaría operativa para fines del 2025.
Publicado en cooperación con EnergíaOnline.com.ar
