El ministro de Agricultura, Luis Basterra, aseguró hoy que el desafío de estos tiempos es «resolver de manera comprensiva» el equilibrio que requiere «generar las divisas necesarias para el desarrollo pero garantizando que la población acceda a los alimentos» y cuestionó a quienes, en ese contexto, le endilgan al Gobierno nacional una «posición ‘anticampo'».
Así lo expresó en un conversatorio organizado anoche por el Instituto Independencia, donde Basterra señaló: «No podemos aceptar que se nos ubique en una posición anticampo, contraria a la producción agropecuaria, un sector muy importante para la economía argentina».
«La responsabilidad que se nos ha asignado demanda mucho diálogo, se trata de una situación compleja, que exige garantizar la producción de alimentos para satisfacer las necesidades de la población y generar divisas», remarcó el funcionario.
En este sentido, subrayó que desde el Ejecutivo nacional vienen «trabajando con los gobiernos provinciales sobre los lineamientos para avanzar hacia un incremento de la producción de carne».
«Sin dudas, estamos construyendo una política federal para resolver de manera comprensiva el equilibrio que demanda la generación de divisas garantizando el consumo en el país», subrayó Basterra en su intervención en el conversatorio organizado por el Instituto Independencia.
Según el funcionario, «todos los ministerios» están enfrentando «este desafío que es generar divisas necesarias para el desarrollo, pero no a costa de que nuestra población no acceda a los alimentos».
En este sentido, explicó: «Hemos tomado medidas que pueden parecer para algunos contrarias a la producción agropecuaria como el cierre a las exportaciones de maíz, para que paremos la pelota y discutamos cómo hacer que la oferta y la demanda se encuentren, desalentando la especulación».
«En el mundo productos primarios han tenido incremento importante en precios, por la pandemia o demanda china, que presionan sobre la oferta; una buena noticia para la Argentina, pero que genera una presión al alza sobre los precios internos de los alimentos», advirtió.
Asimismo, indicó: «Hoy tenemos la suspensión temporaria de las exportaciones de carne, tras crecer del 12 al 30% de nuestra producción, lo que generó una presión muy fuerte que exige que nos pongamos de acuerdo para que todos hagan un esfuerzo».
A su vez, el ministro recordó que «la (resolución) 125 (de 2008) marcó un antes y un después con las patronales del campo» pero al mismo tiempo remarcó que hoy existe un escenario en el cual no se puede «ceder el análisis de la construcción de una política para el sector».