Mientras siguen circulando fuertes y contradictorios rumores en cuanto a quién será finalmente el ministro de Economía de Javier Milei, los más fuertes señalan a Luis “Toto” Caputo como principal candidato.
Desde la Oficina del Presidente Electo, sello creado por Milei para emitir comunicados oficiales, se aclaró este viernes que solo esa vía de difusión es la encargada de realizar anuncios certeros. Pero Caputo ya empezó a probarse el traje de ministro.
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Este mismo viernes por la tarde mantuvo un encuentro con banqueros (nucleados en ABA y Adeba) para intercambiar ideas sobre cómo desarmar la famosa “bola de Leliq” que mantiene en jaque las finanzas del país, por la alta acumulación de deuda en pesos a partir de estas Letras de Liquidación que están en manos del Banco Central.
Al salir del encuentro fue abordado por la prensa, pero solo se limitó a afirmar que la reunión fue “excelente”.
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Los datos oficiales muestran que el BCRA debe unos $23 billones en Leliq, con un crecimiento sostenido exponencial. La tarea de desarmar esa “bomba de relojería”, como la llaman los economistas, será una de las tareas urgentes de la gestión de Milei. Y el presidente electo le habría encomendado esa tarea a Caputo, quien formó parte del equipó económico de Mauricio Macri durante su gobierno.
En diálogo con Newsweek Argentina, el economista Damián Di Pace había analizado antes de la segunda vuelta cuáles serían los retos más apremiantes en materia económica que tendría que enfrentar quien ganara la presidencia. Y apuntó a las Leliq como la mayor de las urgencias.
“Argentina tiene un problema de deuda pública enorme. Hoy las Leliq son un gran inconveniente y va a llevar a que Argentina tenga que tener sí o sí un superávit fiscal urgente. Dado el nivel de espiralización de esas Leliq, la monetización de esas letras en pesos puede implicar un salto inflacionario inimaginable. ¿Qué van a hacer con las Leliq?”, se preguntó.
Y respondió: “Efectivamente, se va a necesitar superávit fiscal para monetizarlas; no se puede seguir imprimiendo, ni colocando letras. De continuar en esa senda, se consolidaría un círculo que no cierra nunca”.
Se debían, de acuerdo a sus datos, “un stock de $ 28 billones, que están remunerando al 300% anual”. “Es exponencial la creación de dinero futuro. Porque en algún momento vas a tener que pagar esas letras. Entonces, como decía, tenés que ir al superávit fiscal urgente y plantear en cuánto lo vas a lograr; y tenés que empezar a reducir la emisión monetaria y la colocación de nuevas letras. No queda otra que ir reduciendo todo es stock”, explicó.
