El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer el último dato sobre la canasta básica previo a las elecciones PASO, que nuevamente mostró un crecimiento por encima de la inflación.
Según el informe, en el mes de junio, la canasta básica alimentaria, que contempla el acceso a una dieta equilibrada, aumentó un 5,2%. Mientras que la canasta básica total, que incluye además bienes y servicios, subió un 6,7%.
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De esta forma, la primera quedó por debajo del índice de precios al consumidor (IPC), que en el mismo mes fue del 6%, pero la segunda se ubicó 0,7 puntos por encima.
Sin embargo, a nivel interanual, ambas pasaron notablemente a la inflación: la canasta de alimentos tuvo un aumento del 124%, y la canasta básica total un 123%.
Con estas variaciones, una familia compuesta por cuatro integrantes (dos adultos y dos menores), necesitó de $104.227 para no caer bajo la línea de indigencia. Para no ser considerada pobre, el ingreso mínimo debió ser de $232.427.
Según la última actualización aprobada por el Gobierno, el salario mínimo vital y móvil (SMVM) en junio era de $80.342, por lo que con uno solo se cubrió apenas el 77,08% de la canasta básica alimentaria.
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