Con el respaldo de Alberto Fernández, el ministro de Economía, Martín Guzmán, finalmente anunció el esperado paquete de medidas anticipadas por el Gobierno en el marco de la “guerra contra la inflación”, que en marzo fue del 6,7%, la más alta en los últimos 20 años.
Tal como se había rumoreado, el funcionario anunció el otorgamiento de dos bonos destinados a los trabajadores informales y a los jubilados de menores ingresos; y, por el otro, un nuevo impuesto a la Renta, que alcanzará a las empresas que hayan tenido “ganancias inesperadas”.
En primer lugar, Guzmán adelantó que el Gobierno nacional implementará un bono por única vez de AR$ 18.000 pesos (a pagar en dos cuotas) enfocado a los trabajadores informales, encuadrados en las categorías A y B del Monotributo, trabajadores informales y empleados/as de casas particulares. La primera se pagará en mayo y la segunda, en junio.
El segundo bono alcanzará a aquellos jubilados que cobren hoy hasta dos jubilaciones mínimas, y se plasmará en un sólo pago de AR$ 12.000. Este monto se sumará al aporte de AR$ 6.000 que se había anunciado la semana pasada, alcanzando los mismos AR$ 18.000 que los monostributistas.
IMPUESTO A LA RENTA
Por otra parte, el titular de Economía anticipó que convocará a los sectores productivos a encontrar alternativas para mejorar la distribución del ingreso, pero aún así puso sobre la mesa un nuevo impuesto.
Se trata de una alícuota sobre la renta considerada “inesperada” como consecuencia del aumento internacional de los precios de los commodities.
Guzmán explicó que esas ganancias extraordinarias se explican por el shock inflacionario global y no por las inversiones que hayan podido realizar. En ese sentido, sostuvo que los Estados tienen en todo el mundo un rol importante en la distribución de esos ingresos y la responsabilidad de usarlos para solucionar una emergencia económica y social.
Para determinar qué empresas serán alcanzadas, precisó que existen varios criterios, pero el primero de ellos es que su ganancia haya sido superior a los AR$ 1.000 millones, algo que en 2021 sólo consiguió el 3,2% de las empresas, según Guzmán. Además, se verificará que en lo que va de 2022 se haya logrado un crecimiento significativo frente a 2021 y se aplicará un descuento a aquellas que decida usar parte de esa tasa para reinversión productiva.
RESPALDO PRESIDENCIAL
Mientras crecen los rumores de cambios en el Gabinete, el anuncio fue realizado junto al presidente Alberto Fernández, quien aseguró que la decisión del Gobierno es intentar que la inflación “autóctona y global” no impacte “en los bolsillos de los argentinos».
En este caso, enfatizó que el foco está puesto en los trabajadores informales y los jubilados, pero aseguró que el sector formal también tendrá su ajuste a partir del avance de las paritarias. “En la próxima semana habrá novedades importantes”, prometió el mandatario.
Finalmente, el presidente contó que estos bonos se financiarán con el producto de ese impuesto y, de manera indirecta, con el crecimiento de la economía: “La recaudación crece y nos permite financiar todo esto”, concluyó.