El próximo viernes, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer la inflación del mes de septiembre. Pero a la espera de estos datos, las mediciones privadas no brindan un panorama favorecedor de cara a octubre.
Según un estudio de la consultora LCG, en la primera semana de este mes, los alimentos y bebidas subieron un 2,82% promedio, y alcanzó un alza del 8% promedio en las últimas cuatro semanas.
De acuerdo al relevamiento, que tomó en cuenta los precios de 8.000 productos en supermercados, el rubro que más aumentó con respecto a la semana anterior son los panificados, cereales y pastas, con 7,4%. Por detrás se encuentran los productos lácteos y huevos (5,9%) y las verduras (4,6%).
Luego de marcar un 7% en agosto, y con proyecciones similares para septiembre, el Banco Central señaló que la inflación prevista para octubre según consultoras privadas se ubicaría cerca del 6,2%. Esto marcaría una baja con respecto a los últimos meses, pero aún se mantendría en niveles altos y se podría llegar a los tres dígitos de aumento interanual.
Ante esta situación, el diputado nacional Daniel Arroyo, señaló en diálogo con AM 990 que el Gobierno nacional tiene hoy por delante “dos grandes desafíos en el corto plazo: estabilizar el precio de los alimentos y recuperar ingresos”.
“A todos les está costando llegar a fin de mes”, expresó el exministro de Desarrollo Social, que además pidió que se regulen los productos de la canasta básica para evitar incrementos desmedidos en los precios.
“El margen de ganancia de las empresas productoras de alimentos ha crecido fuertemente y eso explica, en parte, el crecimiento de la desigualdad y el alto nivel de concentración en Argentina. Creo que hay que generar mecanismos de regulación”, remarcó.
Con respecto al poder adquisitivo, dijo que es entendible que las paritarias ronden el 90% de aumento, aunque advirtió que eso “también genera un aumento de precios”. Por eso, resaltó la necesidad de generar una “articulación general entre las distintas áreas sociales y económicas” para estabilizar los precios de los alimentos.
