De acuerdo a un estudio de Focus Market, consultora dirigida por Damián Di Pace, la canasta alimentaria de diciembre para una familia de cuatro integrantes fue de $73.484. El datos surge del Índice de Precios Canasta Básica Alimentaria Consumo Masivo (IPCACOMA), que se obtiene a través de Scanntech (el lector de código de barras en 670 puntos de venta de todo el país).
Con el dato del último mes de 2022, se concluyó que la inflación interanual en estos productos de primera necesidad fue del 100,68%, lo que da un promedio mensual del 5,78%.
Los productos que más aumentaron frente a 2021, según este seguimiento, fueron el azúcar (179%), los huevos (171%) y los fideos (164%). Pero también hubo otros incrementos, aunque en menor medida, en frutas (45%), legumbres secas (63%) y arroz (64%).
Al respecto, Di Pace sostuvo: «En un contexto en el que rige el programa Precios Justos, hay un comportamiento dual de precios. Por un lado, presencia de los precios acordados en grandes superficies, pero no con un cumplimiento total y precios sin acuerdo y subiendo en los autoservicios nacionales, chinos o pequeñas despensas. De esta manera, completar una canasta básica alimentaria tiene diferentes temperaturas para el bolsillo de los argentinos».
Por supuesto, quienes mayor poder adquisitivo perdieron fueron quienes se encuentran en la informalidad salarial, señaló, y agregó que los monotributistas sufrieron un incremento en los topes y escalas por debajo de la inflación, pero que, en cambio, sí verificaron una mayor carga impositiva, lo cual afectó su disponibilidad de dinero para acceder a los alimentos.
Para los trabajadores autónomos, advierten, la situación es más compleja: los límites para el pago del impuesto a las ganancias han quedado por debajo de una canasta básica total. “Los alimentos han subido por encima de la inflación promedio y los ingresos de estos sectores muy por debajo con alta carga impositiva«, explicó el economista.
Finalmente, concluyó: “Analizando la situación de consumo por familia de productos, todas retroceden en 2022 en los formatos donde se aplica el programa Precios Justos. Alimentos, al igual que Cuidado Personal, son las de mayor caída en consumo mientras Limpieza y Bebidas presentan variaciones negativas de menor magnitud en el acumulado 2022 frente a 2021. El Gobierno mantiene su perspectiva de desaceleración de la inflación para los próximos meses, pero el impacto de la sequía en el precio de alimentos, la suba de los precios regulados y la indexación de los salarios y el dólar hacen compleja la tarea, sumado a un cuadro macroeconómico monetario contenido en el presente con mayores complicaciones de sostenibilidad futura».
(Con información de NoticiasArgentinas.com)
