En el marco de la asunción del nuevo titular de la autoridad reguladora del mercado en Brasil (la CVM), el ministro de Economía, Paulo Guedes, aseguró que la economía mundial se encuentra en una marcada estanflación, pero que la realidad de su país es diametralmente opuesta.
De acuerdo a lo expresado por el funcionario, este escenario será «mucho más grave» de lo que se imaginó inicialmente. Pero, con contraposición, señaló que en Brasil se registra crecimiento económico con una inflación a la baja y un menor desempleo. Según los últimos datos oficiales, la inflación en el país ronda el 11% anual.
«Vamos a ver el universo económico en contracción, pero Brasil está en la otra dirección», afirmó Guedes.
En ese sentido, aseveró que el Ejecutivo mejoró las perspectivas de crecimiento del PIB para 2022, pasando de un 1,5% a un 2%, basándose en la mejora de los indicadores que se registran desde mayo último. En sintonía con la calificadora Moody’s, que sostiene que la guerra en Ucrania favorece a exportadores de materia prima como Brasil, Guedes indicó que, una vez pasados los mayores impactos del conflicto, llegarán mas inversiones.
Para favorecer eso, contó que el Gobierno busca avanzar en una exención impositiva para las inversiones en activos de renta fija. En diálogo con Reuters, ratificó que alcanzará a quienes inviertan en bonos corporativos nacionales: hoy los extranjeros pagan un impuesto del 15% sobre las ganancias de capital de los bonos del sector privado local (pero están exentos del impuesto cuando invierten en la bolsa de valores de Brasil y en la deuda pública); en tanto, los nacionales abonan un impuesto a la renta de entre el 15% y el 22,5%, dependiendo de cuánto tiempo se mantenga.