Son dos de los bloques comerciales más grandes y firmes del mundo contemporáneo, y se unieron con el objetivo de acordar un tratado comercial que transformará el futuro de la geopolítica mundial.
A pesar de que todavía no se haya divulgado la letra chica y queden algunos aspectos por definir, una cosa es segura: este acuerdo cambiará las relaciones internacionales entre la Argentina y el mundo. Estos bloques de integración regional, Mercosur y Unión Europea, finalmente firmaron un acuerdo que se venía debatiendo hace casi 20 años, beneficioso no solo para la Argentina sino para toda la región.
¿Qué acordaron? Levantar gradualmente las barreras arancelarias de bienes comerciales entre bloques. Es decir, un gran número de posiciones arancelarias entrarán en ambos bloques con 0 % de arancel. Esto implica exportar más y también atraer inversiones extranjeras.
Aunque creas que esto es muy lejano y no te concierne, no te engañes: notarás los cambios en tu día a día. “Para el ciudadano a pie, este acuerdo significa más empleo, más movimiento, más rotación de dinero, nuevas oportunidades de trabajo, más capacitación…”, enumeró Alejandro Arroyo, director de la Maestría en Logística de proyectos de integración regional del ITBA. Que marcas europeas lleguen a nuestro país buscando hacer alianzas estratégicas con pymes y otras empresas no es para nada menor.
Para poder disfrutar de todos los beneficios que pueden surgir del acuerdo, Arroyo señala que es necesario realizar ciertos cambios estructurales, como reformas impositivas, laborales, previsionales, políticas y sindicales. “Nuestro país debe encarar estas reformas para permitir que el sector industrial gane productividad y sea más competitivo”, explicó.
Como en todo acuerdo de este tipo, hay ganadores y perdedores, pero Arroyo estima que habrá más beneficiados siempre y cuando estas reformas se lleven a cabo. “Aquellas industrias que estuvieron históricamente protegidas por altos aranceles evidentemente se van a reducir, algunos sectores se van a potenciar e incluso surgirán otros sectores porque se van a generar oportunidades de negocios que hoy no existen”, comentó Alejandro Arroyo.
Habrá que esperar que los parlamentos de los 32 países participantes de ambos bloques aprueben y ratifiquen el acuerdo, algo que puede tardar un par de años. A partir de ahí, automáticamente se realizarán los cambios arancelarios. El resultado será una Ar.gentina más abierta al mundo, lo que posiblemente desencadene futuros acuerdos comerciales con otras potencias.
Gentileza: Revista Mustique.