En el mismo día en que el presidente Javier Milei decidió homenajear a Carlos Saúl Menem colocando un busto con su figura en la Casa Rosada, el Indec dio a conocer que el Gobierno cumplió con la que tal vez haya sido su mayor promesa de campaña: bajar la inflación de manera significativa, tal como lo había hecho el mandatario riojano tras la hiperinflación con la que terminó el Gobierno de Raúl Alfonsín.
Tras un debut en diciembre de 2023 con un Índice de Precios al Consumidor (IPC) por encima del 25%, se trazó la meta simbólica de bajarlo hasta que vuelva a ubicarse en un dígito. Tras un par de meses de expectativas, finalmente ese objetivo se consiguió en abril.
Para el Indec, la inflación de abril fue del 8,8%, lo que implica que el costo de vida se incrementó un 65% en el primer cuatrimestre de 2024 y un 289,4% en la comparación interanual.
Los mayores aumentos del mes pasado se registraron en «Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles» (35,6%), resultado de los incrementos en las tarifas de gas, agua y electricidad; le siguen «Comunicación» (14,2%) y «Prendas de vestir y calzado» (9,6%).
#DatoINDEC
Los precios al consumidor (#IPC) aumentaron 8,8% en abril de 2024 respecto de marzo y 289,4% interanual. Acumularon un alza de 65% en el primer cuatrimestre https://t.co/i3C4nkQCDO pic.twitter.com/OOjfQn7H8i— INDEC Argentina (@INDECArgentina) May 14, 2024
De todos modos, el dato que está mirando el Gobierno es la inflación núcleo, que no incluye los componentes estacionales, la cual fue del 6,3% en abril, lo que marca la tendencia a la baja de este índice.
Por supuesto, el Gobierno celebró la noticia. El vocero presidencial, Manuel Adorni, publicó en su cuenta de la red social X: «La inflación de abril fue del 8,8%. Gran parte se dio por el sinceramiento de precios regulados. En alimentos la inflación fue incluso menor: 6%. La inflación se está pulverizando y tiene su certificado de defunción firmado. Fin».
Pese a ello, los opositores al Gobierno libertario señalan que se trata de un índice ficticio, en el sentido de que se produce por una abismal caída del consumo y de la producción, lo que está empujando los precios hacia abajo, no por la propia dinámica antiinflacionaria, sino por el desplome de la demanda.
Asimismo, economistas aliados del Gobierno como Domingo Cavallo, le advierten al Ejecutivo que la baja de la inflación encontraría su piso en junio, en torno al 6%, si no avanza en otras medidas como la salida del cepo.
