A través de un decreto, el presidente Javier Milei impuso finalmente una nueva fórmula de movilidad jubilatoria, que modifica la aplicada por Alberto Fernández en plena pandemia. Luego de meses de discusiones en el Congreso, el Ejecutivo decidió poner en marcha un nuevo sistema para actualizar los haberes en un contexto de altos niveles inflacionarios y de una licuación de los ingresos en pesos.
Para entender mejor en qué consiste esta reforma, Newsweek Argentina conversó con el periodista especializado en temas previsionales y columnista de Radio Rivadavia, Nicolás Machuca, quien señaló que este cambio “ es el más importante de los últimos años en materia de jubilaciones”, porque “marca el cambio de la movilidad. “Es el cambio de la fórmula que se puso en 2021, así que de acá en más se va a modificar todo”, subrayó.
“Todo cambia radicalmente”, indicó, y agregó: “De cobrar cada tres meses, como va a ser hasta junio por la fórmula que aprobó Alberto Fernández en 2021 (se aprobó en diciembre de 2020 y se ejecutó en enero de 2021), a aumentar todos los meses. Es un avance fuerte”.
Sin embargo, también advirtió: “Lo que pasa es que hay un retraso muy fuerte en el haber jubilatorio. Entonces, va a ser difícil empalmar con lo que necesita un jubilado para llegar a fin de mes”.
El Gobierno oficializó por decreto la nueva fórmula de movilidad jubilatoria
Según aclaró Adorni, en abril va a funcionar como venía funcionando, es decir, con un 13,2% de inflación de febrero, publicado en marzo, más un 12,5% de adicional. Este adicional se paga por única vez y tiene que ver con el reclamo de la oposición para que se pague también la inflación de enero. Este 12,5% es el reconocimiento, por llamarlo de alguna manera.
“Las jubilaciones mínimas perdieron en todo este año un 33%. Los que no cobran bonos perdieron más del 40%. Lo que pasó en este trimestre fue una licuación fuerte”, detalló Machuca.
Y explicó: “Lo que pasa es que el Gobierno te decía ‘yo no gasto porque no tengo más ingredientes en la torta para repartir’ o ‘tengo muchos jubilados para cubrir y no puedo aumentarles a todos’. Y ahí es donde aparece el bono, que es todo un misterio, y espero que no se manden un a macana con esto: si no pagan bonos, la jubilación va a ser inclusive menor que la de diciembre pasado”.
CÓMO FUNCIONA LA NUEVA FÓRMULA
En diálogo con este medio, el periodista especializado indicó: “En mayo se pagará la inflación de marzo, que se va a conocer en abril; en junio, la de mayo; y en julio directamente todos se van a guiar por el índice mensual”.
Aunque aseguró que se trata de un mensaje clarificador y que deja atrás una fórmula que claramente no estaba funcionando, también resaltó: “El tema es que en mayo, junio e incluso julio se va a adelantar parte de la movilidad que se va a dar por última vez en junio. Por ejemplo, en junio termina la fórmula de Alberto Fernández que te calculaba un 50% de recaudación de Anses y 50% de evolución salarial. Vamos a suponer que el aumento trimestral de inflación te diera 20%. Bueno, el Gobierno va a dar entre mayo y junio el IPC, y pongamos que el de marzo dé un 10%: te va a dar entonces un aumento del 10% para cobrar en mayo; y si la movilidad de Alberto Fernández te daba un 20%, te va a pagar aproximadamente otro 10%. Y así, hasta julio cuando se terminaría de acomodar todo. Explicar lo que va a pasar en mayo y junio requiere detalles muchísimo más técnicos”.
“Abril es más sencillo: el IPC de febrero más el 12,5% que se paga por única vez. Después, lo seguro será IPC todos los meses”, sintetizó.
Pero Machuca insistió en que el otorgamiento de bonos será clave para evitar un nuevo y duro impacto social y distorsiones en el propio sistema previsional. “El problema del bono es que tiene dos caras. La positiva es que alimenta a los de la mínima. Imaginate que ahora van a cobrar $170.000 y les agregan $70.000 de bono, si es que lo siguen pagando así, y asando a ser un ingreso de $240.000 en abril. Pero, si no pagan bonos, va a ser de mucho menos. Ahora, la contrapartida del bono es que se les paga a los de la mínima, y eso achata la famosa pirámide. El que percibe la mínima lo cobra; el que percibe más, no. De este modo, se termina con el de la mínima cobrando lo mismo o más que los que tienen una jubilación mayor”, contó.
Finalmente, ¿es posible que el Congreso tome cartas en el asunto y defina una agenda previsional propia, tal como lo vienen proponiendo algunos legisladores de la oposición (tanto los más acérrimos como los dialoguistas)? Para Machuca, es probable que el tema siga en discusión, pero por el momento no ve que pueda tomarse alguna contramedida.
“En el Pacto de Mayo está la reforma previsional, y a mí me decían la semana que esto es una parte de ese pacto, de una ‘reforma previsional integral’, según la llaman. En ese marco se va a definir la reforma laboral, que impacta mucho en los trabajadores que aportan para los jubilados. Y en base a eso quizás pueda haber alguna modificación, una reforma jubilatoria en general. Entonces, el debate se dará en el Pacto de Mayo o en las discusiones por la Ley Ómnibus en el Congreso”, concluyó.