El Gobierno nacional presentó este martes los nuevos esquemas de la segmentación tarifaria, que afectará a los precios en los servicios de electricidad, gas natural y agua.
La secretaria de Energía, Flavia Royón, explicó que la diferenciación no solo tiene como fin reducir el ahorro fiscal ante los aumentos de precios a nivel mundial, sino también “instalar la educación del uso racional y sustentable de los recursos” en el país.
“Con este contexto de guerra, nuestro país ha tenido que gastar US$ 3.600 millones más para garantizar el abastecimiento y funcionamiento con normalidad de nuestro país”, señaló la funcionaria.
En ese sentido, remarcó que desde el Gobierno trabajan para que durante lo que resta del año el gasto sea “más eficiente” y puedan “reducir y cuidar las divisas para reducir la importación dentro de los límites de seguridad para asegurar el abastecimiento”.
Según mencionó Royón, la segmentación tarifaria tiene un “criterio de una distribución basada en la justicia social y la equidad”, ya que advirtió que “el 50% de la población de mayores ingresos recibe el 60% de los subsidios”. “Queremos que llegue el subsidio al que más lo necesita”, enfatizó.
Con respecto al sector energético, hay 4 millones de personas que no solicitaron los subsidios y tendrán un incremento notable en las facturas de los servicios. Sin embargo, aseguró que buscan “identificar a quienes necesitan la asistencia y no han tenido la posibilidad de inscribirse en el formulario”.
CÓMO SERÁN LOS NUEVOS VALORES
En el caso del gas natural, hay 269.725 hogares en todo el país (4,69% del total de usuarios) que se ubicaron en el Nivel 1 de mayores ingresos y tendrán incrementos en la factura del 167%, que se aplicará gradualmente en los próximos tres bimestres.
En cuanto a quienes estén en el Nivel 2 de menores ingresos (2.880.090 hogares), mantendrán la tarifa social y no sufrirán variaciones. Por último, quienes estén en el Nivel 3 de ingresos medios (2.599.550 hogares) tendrán topes de consumo subsidiados acorde a cada región y el excedente se abonará al valor pleno.
Sin embargo, desde el Gobierno señalaron que la demanda de gas en los distintos hogares “no se encuentra relacionada con el nivel de ingresos y se vincula directamente con condiciones climáticas, cantidad de participantes del hogar, características constructivas de la vivienda y la eficiencia de los equipos domésticos”.
Para el caso de la electricidad, serán 399.156 usuarios de alto nivel adquisitivo (4,49% del total) quienes perderán los subsidios; mientras que los 5.040.120 de bajos ingresos seguirán con la tarifa social.
Los 3.451.722 usuarios que quedaron en el nivel medio tendrán un tope de consumo subsidiado de 400 kilowatts por mes (550 kilowatts en zonas que no haya gas natural por redes), y lo que se supere se pagará con tarifa plena.
Por último, unos 3,5 millones de hogares del Nivel 1 perderán el beneficio en la tarifa de agua, el cual se aplicará a partir del 1° de noviembre. Por su parte, los de ingresos bajos y medios tendrán “una quita en forma progresiva” que se terminará de hacer efectiva en marzo de 2023. Los beneficiarios de tarifa social o comunitaria quedarán excluidos.
Al respecto, la titular de la empresa AySA, Malena Galmarini, señaló que este organismo diseñó un esquema con tres zonas según el código de zonificación, y solo el 15% de sus usuarios abonará la boleta plena de agua en noviembre.
