Según una filtración del medio Politico, la histórica decisión de la Corte Supremo de Estados Unidos que despenalizó el aborto en el país tendría los días contados.
Hace medio siglo, Estados Unidos reconoció el derecho constitucional de las mujeres a acceder a un aborto tras el histórico fallo del caso Roe vs. Wade. Fue en 1973 cuando la Corte dictaminó que una persona podía elegir si continuaba o no con su embarazo amparada en el derecho constitucional a la privacidad, garantizando un amplio acceso al aborto en todos los estados y otorgándole a las mujeres derechos absolutos para abortar en los primeros tres meses de embarazo y derechos limitados entre el tercero y el sexto mes de embarazo. Esta medida evitó que muchas personas murieran a causa de abortos ilegales y peligrosos.
El documento se trata de un borrador de la opinión del juez Samuel Alito y la mayoría de sus colegas conservadores en donde muestra que la corte se prepara para anular la legislación histórica de 1973.
“Roe estuvo terriblemente equivocado desde el principio», dice el borrador escrito por el juez Samuel Alito. «Sostenemos que Roe y Casey deben ser anulados«, agrega, mencionando otro fallo histórico en derechos reproductivos, Planned Parenthood v. Casey, que en 1992 reafirmó Roe v. Wade.
Otros cuatro jueces designados por los republicanos, Clarence Thomas, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barret, también apoyaron la decisión, formando una mayoría.
La votación se llevaría a cabo dentro de dos meses, el tiempo que se estima que tomará antes de que se anuncie una decisión final de la Corte Suprema. Pero si el borrador permanece mayormente sin cambios y los votos no cambian, las consecuencias del fallo de la corte en el país serían tremendas.
LAS CONSECUENCIAS DE SU ANULACIÓN
Anular el fallo histórico significaría que la decisión sobre el derecho al aborto dependería de los estados individuales.
Si bien en algunos estados los abortos seguirán siendo legales, se espera que la mitad de todos los estados, principalmente en el sur y el medio oeste, actúen de inmediato para imponer amplias prohibiciones. Veintidós estados ya tienen prohibiciones previas a Roe y enmiendas constitucionales en sus libros que prohibirían los abortos si la Corte Suprema revocara Roe v. Wade.
Por otro lado, hay al menos 17 estados que ya accionaron para proteger el derecho al aborto dentro de sus fronteras en caso de que se revoque el fallo.
Según el Centro de Derechos Reproductivos, tales restricciones harían que el país se dividiera en «desiertos de aborto», donde interrumpir un embarazo es ilegal, y «refugios de aborto», estados que continuarán brindando atención médica para que mujeres puedan abortar sin infringir la ley.
Estados Unidos sería uno de los únicos cuatro países del mundo en restringir el acceso al aborto en los últimos 30 años, uniéndose a Polonia, El Salvador y Nicaragua.
Publicado en cooperación con Newsweek
