Lucia Conti es una argentina que llegó hace unos meses a Doha, la capital de Qatar para trabajar en hotelería y esta mañana conversó con Pablo Rossi en Radio Rivadavia sobre la vida en ese país. Lo primero que explicó fue «más allá de la diferencia cultural, las cosas funcionan» y a modo de ejemplo, indicó que «el Metro funciona fantásticamente bien, ahora está el Mundial entonces está repleto, pero sino viajás practicamente solo».
«La limpieza en las calles, la atención en supermercados», agregó y contó: «Ayer fui al supermercado y al lado de cada caja, hay una persona extra que te embolsa y te lleva las bolsas hasta el auto». En esa línea incluyó también «la atención al turista» y resaltó que «hay gente por todos lados, que te ayuda, que te brinda asistencia».
Al ser consultado si las personas originarias de Doha «son amigables con los argentinos», la entrevistada hizo hincapié en que «tienen mucho fanatismo por la Argentina» y por lo tanto, indicó que «vos decís que sos de Argentina y ya te sonríen, te hablan de Messi y entonces, se genera no un amiguismo, pero sí empatizan desde ese lado».
En ese punto, si bien afirmó que «están muy contentos de que la FIFA esté en su país, más allá de que quedaron afuera (del Mundial)«, subrayó que «siempre marcan la diferencia entre el local y el extranjero, lo hacen notar».
Y sobre la sociedad qatarí en sí, sostuvo que «están avanzados en un montón de cuestiones como lo tecnológico, pero a nivel cabeza es como que están en el siglo pasado».
En consecuencia, remarcó que «son conservadores, entonces hay temas, comentarios que no se tocan« y agregó que «cuando eso ocurre, los latinos nos miramos, no emitimos palabra, pero estamos en desacuerdo, ya que, nos encontramos muy lejos de eso».
Para citar un ejemplo, precisó que «todavía siguen pensando que la homosexualidad es una enfermedad», y añadió: «Nosotros (los latinoamericanos) preferimos callarnos y no opinar, debido a que, es su cultura y la entendemos, la respetamos».
