Por Nick Mordowanec, de Newsweek
Estados Unidos está a la vanguardia del desarrollo e incorporación de inteligencia artificial como parte de su ejército, aunque los avances deben continuar a la par de los adversarios, según los expertos.
La IA se ha vuelto rampante en los sectores público y privado con respecto al software creado con fines de defensa y programas ubicuos como ChatGPT. Esta intersección entre tecnología e ingenio humano ha generado elogios y preocupación por la rápida velocidad a la que está ocurriendo, impulsada por la forma en que Estados Unidos, sus aliados y adversarios están incorporando dicha inteligencia en la vida cotidiana de las personas.
Más del 50 por ciento de los estadounidenses encuestados recientemente como parte de una Encuesta de Defensa Nacional realizada por el Instituto Ronald Reagan dijeron que China representa el mayor riesgo para el futuro de Estados Unidos, lo que ejemplifica un mayor impulso hacia subsidiar la IA a través del gasto en defensa para mantener una ventaja tecnológica.
Estados Unidos continúa modernizándose en otras formas, incluyendo más financiamiento para pruebas nucleares y revitalización de aviones y buques de guerra. La reciente presentación del nuevo bombardero furtivo nuclear B-21 Raider, desarrollado por Northrop Grumman, para la Fuerza Aérea de Estados Unidos podría considerarse el siguiente paso hacia una nueva frontera militar debido a la capacidad clandestina del avión «invisible» para penetrar las defensas aéreas y alcanzar objetivos en todo el mundo que aproximadamente el 90 por ciento de los bombarderos estadounidenses actuales son incapaces de alcanzar.
EL COMIENZO DE UNA NUEVA ERA
El B-21 es un excelente ejemplo de su construcción física y capacidad para transportar ojivas nucleares y de cómo la tecnología está acelerando las pruebas y el diseño, según Tate Nurkin, investigador principal no residente de la Iniciativa de Defensa Avanzada y Seguridad del Indo-Pacífico del Atlantic Council.
Nurkin dijo a Newsweek que el diseño y la ingeniería digitales han acelerado el diseño y las pruebas del bombardero, algunas de las cuales se realizan digitalmente mediante simulaciones habilitadas por IA antes de que se construya el primer avión. Lo llamó «clave» para mantener el programa según lo previsto y permitir actualizaciones más rápidas al tiempo que se mejora la sostenibilidad y la gestión de la cadena de suministro.
El mapa de la destrucción: el sorprendente alcance de la nueva bomba atómica de EEUU
«Las arquitecturas abiertas también acelerarán las actualizaciones, especialmente las actualizaciones de software, incluido el software impulsado por IA», dijo Nurkin, quien ha estudiado el tema extensamente. «[Para] la flexibilidad de la misión, también puede servir como un sensor sigiloso o un nodo de fusión de comunicaciones/datos además de servir como un bombardero sigiloso. El área de fusión de datos es donde la IA probablemente tenga el mayor impacto».
Tom Longstaff, director de tecnología del Instituto de Ingeniería de Software (SEI), dijo a Newsweek que la Fuerza Aérea tradicionalmente ha estado por delante de lo que ocurre en el dominio público con programas como ChatGPT, reconociendo la necesidad de una mayor madurez en las pruebas y evaluaciones de la IA.
SEI es un centro de investigación y desarrollo financiado con fondos federales, respaldado por el DOD y operado por la Universidad Carnegie Mellon que analiza software, ciberseguridad e inteligencia artificial para el gobierno federal.
Estos nueve países gastaron casi US$ 160.000 por minuto en armas nucleares
Longstaff copresidió un comité de expertos académicos, gubernamentales y de la industria patrocinado por el Departamento de Defensa que se reunió varias veces en 2022 y 2023. Publicaron un informe titulado «Desafíos de prueba y evaluación en sistemas habilitados para inteligencia artificial para el Departamento de la Fuerza Aérea», que fue publicado en septiembre por las Academias Nacionales. El informe recomienda que el Departamento de la Fuerza Aérea de EE. UU. (DAF) invierta en el desarrollo de la IA y dé prioridad a las pruebas y evaluaciones de la IA.
El informe tardó aproximadamente un año en elaborarse. Las Academias Nacionales encargaron al comité que profundizara en tres cuestiones importantes sobre si la Fuerza Aérea puede compararse con el sector privado con respecto a las pruebas y evaluaciones de sus sistemas.
«Analizamos algunos casos de uso específicos y áreas específicas en las que se habilitaría la IA, especialmente en nuevas plataformas aéreas, por lo que el B-21 ciertamente estaría en esa categoría», dijo. «También estábamos analizando mucho la autonomía, por lo que analizamos la prueba y evaluación de sistemas de vuelo autónomos, cosas como Loyal Wingman (un dron militar con un sistema de control de IA que puede transportar una gran carga de armas) y áreas que serían en asociación con aviones tripulados que básicamente se utilizarían en diversas situaciones de despliegue».
Si bien el informe no se refiere específicamente a los sistemas del B-21, Longstaff dijo que la IA, que puede soportar plataformas que incluyen autonomía para vuelo, detección de objetos, identificación de objetivos e identificación de contradefensa, incorporada en otros aviones se prestará a esto. nueva tecnología.
Cómo podría Biden poner fin a la Guerra de Corea y evitar un conflicto nuclear
Los sistemas de IA pueden reconocer cuándo la plataforma necesita notificar al piloto o reaccionar para proteger la aeronave o si pueden permitir que la aeronave cumpla su misión mediante el reconocimiento de objetivos o la planificación de vuelo.
«Hay muchas áreas dentro de la IA que aumentarán la capacidad de los pilotos humanos en estos sistemas de vuelo», dijo.
IMPULSO TECNOLÓGICO DE AÑOS POR PARTE DEL DOD
En 2018, el Departamento de Defensa publicó un informe sobre el aprovechamiento de la IA para la seguridad y la prosperidad nacional. Hoy en día, el DOD financia 686 programas centrados en la IA en todo el sistema de defensa, según la Academia Nacional de Ciencias, Ingeniería y Medicina. En 2022, había más de 600 programas relacionados con la IA en todo el departamento.
El comité de Longstaff investigó si existía preparación de IA para que la utilizara la Fuerza Aérea, y otro fue cómo se comparaban los procedimientos de la rama militar con los del sector privado. El tercer punto de interés era específico de la IA adversaria y si la Fuerza Aérea estaba preparada o no para probar sistemas contra enfoques de IA adversaria si fuera necesario.
«Nuestros hallazgos fueron que la Fuerza Aérea, como parte de la empresa del Departamento de Defensa, realmente lideraba muchas de las investigaciones con respecto tanto a la inteligencia artificial como a la evaluación de pruebas con inteligencia artificial», dijo Longstaff, en alusión a la inversión positiva entre las Fuerzas Armadas financiadas con fondos federales. La comunidad del Centro de Investigación y Desarrollo (FFRDC), pero también la academia, los laboratorios gubernamentales e incluso la inversión del sector privado.
A través de varias entrevistas y visitas al sitio, el comité identificó diferentes métodos y riesgos para la IA adversaria. El principal hallazgo secundario que descubrieron fue que poner esto en práctica requiere un liderazgo significativo dentro de la Fuerza Aérea, lo que fomenta la necesidad de avanzar en el conocimiento de la IA de los altos mandos.
«Y eso debe suceder con bastante rapidez porque están vinculados a plataformas que ya se están lanzando y que ya están saliendo, esta importante huella de IA en muchos de los sistemas del Departamento de Defensa que se están lanzando», dijo Longstaff.
Nurkin dijo que la IA está liberando a los humanos para que lleven a cabo tareas más valiosas, como gestionar misiones, tomar decisiones y ayudar a centrar la atención humana en amenazas, desafíos, dinámicas, desarrollos y objetivos clave.
Dijo que Estados Unidos, junto con China, probablemente esté liderando el mundo en términos de la escala de inversión de defensa en IA y el desarrollo de capacidades relacionadas con la IA, desde tareas administrativas mundanas hasta sistemas autónomos y logística. El DOD se ha posicionado para un desarrollo más eficaz.
«Sin duda, la mayoría de los ejércitos modernos están invirtiendo en una variedad de capacidades militares de IA, aunque con la excepción de China, yo diría que los esfuerzos de investigación y desarrollo de Estados Unidos son más extensos», dijo Nurkin. «China es muy activa en esta área y sería el principal competidor en términos de escala de inversión y desarrollo de IA, pero en general la mayoría de los ejércitos están buscando formas de lograr las ventajas en velocidad, eficiencia, escala y precisión que permite la IA.
«Sin embargo, la historia tiene un poco más de matices que solo la escala de la inversión del DOD en investigación y desarrollo de capacidades de IA porque, hasta la fecha, el DOD ha tenido dificultades en ocasiones para adoptar estas capacidades a escala».
Corea del Norte se prepara “seriamente” para una guerra nuclear
Una razón por la cual ampliar tales capacidades podría atribuirse a la terquedad del propio DOD, dijo, haciendo referencia a la cultura burocrática del departamento «que tiende a querer avanzar lentamente y no siempre adopta el tipo de cambios en concepto, cultura y proceso». “Es necesario adoptar más plenamente la IA y el HMT (equipo hombre-máquina) a escala».
«Los instintos e incentivos de la burocracia también afectan la forma en que el Departamento de Defensa compra cosas», dijo. «El proceso de adquisición de software es muy lento, lo que no sólo significa que es difícil integrar y adoptar tecnologías de vanguardia, sino que también crea desafíos reales para la industria comercial y las nuevas empresas que están haciendo cosas realmente interesantes en IA y desarrollo de software.
«La participación y la aceleración de los procesos de compra de software y otras tecnologías emergentes tanto de la industria de defensa tradicional como de la industria comercial es absolutamente fundamental para mejorar la adopción del Departamento de Defensa de capacidades habilitadas por IA».
DEFENDERSE DE LOS CIBERATAQUES
Los efectos de la IA ya se han observado, señaló Nurkin.
Hizo referencia a cómo, en septiembre de 2021, el secretario de la Fuerza Aérea, Frank Kendall, reveló que se utilizaban objetivos habilitados por IA en una «operación de cadena de destrucción en el mundo real», lo que significa que se utilizaban algoritmos para ayudar a discernir objetivos para ataques militares.
«Actualmente, la IA se está utilizando para detectar objetivos, por ejemplo en imágenes o vídeos satelitales, lo que a los humanos les llevaría mucho más tiempo detectar», dijo Nurkin. «Por lo tanto, están acelerando el proceso, pero no seleccionan objetivos de forma autónoma. Los recomiendan y cursos de acción a los humanos, quienes luego toman la decisión».
También existe el Comando y Control Conjunto de Todos los Dominios (JADC2), un ambicioso programa del Departamento de Defensa desarrollado para fusionar datos y unificar todas las ramas de las Fuerzas Armadas de los EEUU (tierra, aire, mar, submarino, espacio, cibernético) y luego determinar posibles objetivos y recomendar las mejores armas, tanto cinéticas como no cinéticas, y cursos de acción para atacar esos objetivos.
«La gran conclusión es que la IA se prueba, experimenta y despliega cada vez más en varios conjuntos de misiones y tareas, pero todavía existen desafíos para la incorporación a escala en todo el Departamento de Defensa y las Fuerzas Armadas», añadió Nurkin.
Longstaff dijo que el principal desafío en el que tanto la Fuerza Aérea como otras ramas deberían seguir enfocándose son los ataques cibernéticos tradicionales que potencialmente pueden alterar el entrenamiento de dichos sistemas antes de su despliegue, para tal vez alterar lo que estos sistemas podrían hacer una vez que se hayan implementado. Estamos vivos en la cadena de suministro.
«La IA no es simplemente entregar nuestra defensa a una computadora», dijo Longstaff, y agregó: «No se trata de entregar la capacidad de defender nuestro país y hacer todo a una computadora que podría volverse contra nosotros. Simplemente esa no es la forma en que funciona la tecnología. No tenemos el tipo de tecnologías que la gente teme más en ese sentido, y tampoco las estamos desarrollando en los sistemas del Departamento de Defensa de manera que entreguemos ese locus de control”.
Y concluyó: «Entonces, por el momento, creo que lo que la gente debería darse cuenta es que el aprendizaje automático realmente nos está ayudando a hacer mejor nuestro trabajo en prácticamente todos los sentidos que se puedan imaginar. Pero no se trata de ceder el control».
Publicado en cooperación con Newsweek
