Australia y Países Bajos anunciaron el inicio de una acción legal conjunta contra Rusia a causa del derribo del vuelo MH17 de Malaysia Airlines, que el 17 de julio de 2014 fue interceptado por un misil tierra-aire mientras volaba sobre el este de Ucrania, cobrándose la vida de 298 civiles, entre ellos, 196 neerlandeses y 38 australianos.
El procedimiento se radicará ante la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI), una agencia de la ONU especializada en seguridad aérea que, a pesar de que cumple la función de mediador, tiene la potestad para condenar o imponer sanciones contra países que violen la ley internacional.
Australia y Países Bajos se basarán sobre una investigación internacional que determina que el sistema de misiles utilizado para derribar el MH17 con destino a Ámsterdam desde Kuala Lumpur, fue transportado desde y hacia Rusia por los rebeldes separatistas.
Para Wopke Hoekstra, ministro de Asuntos Exteriores de Países Bajos, la muerte de las víctimas «no puede ni debe quedar sin consecuencias», por lo que espera «asegurar el reconocimiento internacional de que Rusia es responsable del desastre del MH17» bajo esta acción legal.
Y aunque evitó explayarse sobre la guerra en Ucrania, agregó que «los acontecimientos actuales» en ese país «subrayan la importancia vital de esto».
Coincide con sus declaraciones el gobierno australiano, que expresó en un comunicado que «la invasión no provocada e injustificada de Rusia en Ucrania y la escalada de su agresión subraya la necesidad de continuar nuestros esfuerzos duraderos para hacer que Rusia rinda cuentas por su flagrante violación del derecho internacional y de la Carta de la ONU, incluyendo las amenazas a la soberanía y el espacio aéreo».
Sin embargo, Moscú ha negado en más de una ocasión su presunta implicación en el incidente y en octubre de 2020 se retiró unilateralmente de las negociaciones con ambos países.
Algo que el primer ministro australiano Scott Morrison considera «inaceptable». En efecto, reveló que «llevar el asunto a la Organización de Aviación Civil Internacional de la ONU sería un paso adelante en la lucha por las víctimas».
Aunque el resultado de la OACI es incierto, los expertos señalan que la medida podría impulsar a Rusia a volver a las negociaciones. Además, podría derivar en una demanda en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Australia y Países Bajos exigen una reparación completa por los daños causados y la suspensión del derecho de voto de Rusia en la OACI, que establece las normas para el transporte civil.
Tribunal neerlandés investiga a cuatro sospechosos
Mientras tanto, un tribunal de Países Bajos juzga desde hace dos años a cuatro sospechosos -tres rusos y un ucraniano- por su presunta responsabilidad en el derribo del vuelo MH17.
Según la fiscalía, los sospechosos son responsables de organizar la instalación de lanzamisiles, su despliegue y su transporte desde y hacia Rusia. A pesar de que admite que los presuntos implicados no fueron quienes dieron la orden de derribar el avión, considera que debieron haberlo evitado, por lo que el pasado diciembre pidió cadena perpetua para todos.
Se espera que para finales de 2022 el tribunal pueda dictar una sentencia para los implicados que siguen en libertad y que no han acudido al tribunal neerlandés, informa el sitio France24.com
Fuente: www.noticiasargentinas.com