La baja de la edad de imputabilidad es un tema de discusión en Argentina. El Ministerio de Seguridad, encabezado por Patricia Bullrich, enviará un proyecto al Congreso para fijar la baja de la edad de imputabilidad a los 13 años. En la actualidad, está en 16 años. En sus últimas declaraciones, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, apoyó esta iniciativa.
Si se mira América Latina, ¿cuál es la situación en Chile, Brasil y Uruguay?
Uruguay tiene la edad de imputabilidad penal en 18 años y además tiene un sistema infraccional adolescente para menores de 13 a 17 años. En Brasil, el número es también los 18 años, junto con medidas socioeducativas a partir de los 12 años. En Chile la situación es parecida, pero hay un sistema de justicia penal especial para mayores de 14.
En detalle, según informó Chequeado, en Uruguay el artículo 34 del Código Penal de ese país establece que «no es imputable el que ejecuta el hecho antes de haber cumplido la edad de 18 años». Para quienes tienen menos de 18 años aplica el Código de la Niñez y Adolescencia, que en su artículo 69 precisa cuáles son las infracciones a la ley penal por parte de adolescentes de entre 13 y 17 años.
En octubre de 2014, en Uruguay se realizó un plebiscito constitucional para bajar la edad de imputabilidad a 16 años y poder juzgar como adultos a los jóvenes de 16 a 18 años. Pero, no logró los votos necesarios para ser aprobado.
En Chile la edad de imputabilidad penal es de 18 años y hay un sistema de justicia penal especial para los mayores de 14 años. La Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (Ley 20.084) detalla: «Los y las adolescentes entre 14 y 17 años que son responsables ante la ley penal, tienen derecho a defensa gratuita y especializada, y en el evento de ser condenados/as a sanciones privativas de libertad, no serán derivados/as a recintos carcelarios adultos, sino a centros especiales para adolescentes».
Allí «reciben un conjunto de garantías, como acceso a educación y programas de rehabilitación antidrogas y alcohol».
En Brasil, la edad de imputabilidad penal es a los 18 años, como lo determina el artículo 27 del Código Penal brasilero, que puntualiza que «los niños menores de 18 años son penalmente inimputables, quedando sujetos a las normas establecidas en la legislación especial».
Para aquellos de menos de 18 años se llevan adelante «medidas socioeducativas. Varían desde los tres años de internación hasta la participación en proyectos educativos y culturales», contó el antropólogo brasilero Luiz Eduardo Soares a Chequeado y agregó que «los delitos son los mismos que en el Código Penal, pero los menores de 18 años no son encarcelados, sino aprehendidos».
