Mientras continúa en el mundo la tensión por la escasez de vacunas, la firma alemana Bayer anunció que asistirá a CureVac a producir su vacuna experimental contra el coronavirus en la planta de Wuppertal, al oeste de Alemania.
CureVac, que se asoció con Bayer en enero, inició en diciembre las últimas pruebas de su vacuna experimental y dijo que espera tener resultados provisionales en el primer trimestre.
Bayer es el último fabricante de fármacos que se ha unido al esfuerzo por remediar la escasez de vacunas contra el COVID-19, después de que Novartis y Sanofi dijeran la semana pasada que ayudarían a producir la vacuna de Pfizer.
Los gobiernos europeos han enfrentado críticas por los cuellos de botella en el suministro y la producción, ya que AstraZeneca, Pfizer y Moderna han anunciado recortes en los volúmenes de entrega justo cuando se esperaba que aumentaran la producción.
Alemania -la mayor economía de Europa- se ha visto paralizada por un segundo confinamiento introducido en noviembre, y muchos ciudadanos miran con envidia el ritmo más rápido de vacunación en Gran Bretaña, Israel y Estados Unidos.
CureVac, que cotiza en el Nasdaq y está respaldada por la Fundación Gates y GlaxoSmithKline, así como por el gobierno alemán, ha dicho que pretende producir hasta 300 millones de dosis de la vacuna en 2021. Debido a la cooperación con Bayer, ahora espera poder fabricar entre 600 millones y 1.000 millones de dosis en 2022.
También te podría interesar: OMS pide a los países ricos que no peleen por el «pastel» de vacunas