EL PANEL Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) se reúne a partir del lunes para preparar un nuevo informe sobre el clima y revelará sus pronósticos el 9 de agosto después de dos semanas de reunión virtual entre expertos de sus 195 Estados miembros.
El acuerdo de París de diciembre de 2015 fijó como objetivo limitar el calentamiento global “muy por debajo” de +2° C en comparación con la era preindustrial, y de ser posible +1.5° C.
En las últimas semanas, la humanidad ha sufrido una ola de calor sin precedentes en Canadá, incendios en el oeste de Estados Unidos, inundaciones catastróficas en Alemania y Bélgica y un diluvio en China.
Al día de hoy, el planeta ha ganado aproximadamente 1.1° C desde la revolución industrial. Y cada décima adicional de grado cuenta porque acarrea fenómenos extremos.
“Si no reducimos nuestras emisiones en la próxima década, no lo conseguiremos. Lo más probable es que los +1.5° C se alcancen entre 2030 y 2040, son las mejores estimaciones de que disponemos hoy”, ha declarado el climatólogo Robert Vautard, uno de los autores de esta primera parte de la evaluación del IPCC.
Los expertos también analizarán cómo cambiará la Tierra en los próximos 30 años o incluso antes. Estos efectos se harán públicos después de la COP26, la conferencia climática de la ONU prevista en noviembre, en el Reino Unido.
Muchos esperan que el informe que se presentará en agosto ejerza presión sobre los gobiernos para que apliquen las políticas necesarias.
“Estamos confrontados a diario a la destrucción y al sufrimiento (…). Es importante reconocer que hablamos del futuro del planeta. No podemos jugar con esto”, insistió esta semana Patricia Espinosa, alto cargo de la ONU sobre el clima.
En este contexto, la presidencia británica de la COP26 reúne a ministros de unos 40 países este domingo y lunes para “impulsar” las negociaciones. Para poder contener el calentamiento a +1.5 ° C habría que reducir cada año las emisiones en un 7.6 por ciento en promedio, entre 2020 y 2030, según la ONU.
En 2020 cayeron debido a la pandemia, pero se espera que vuelvan a subir. A ese respecto, la Organización Meteorológica Mundial estima en 40 por ciento la probabilidad de que las temperaturas suban más de 1.5° C en un año de aquí a 2025.
Publicado en cooperación con Newsweek México