El presidente de Perú, Pedro Castillo, acaba de recibir un nuevo golpe a su gobernabilidad. Además de las múltiples investigaciones por casos de corrupción y del avance de un nuevo intento de juicio político en un Congreso controlado por una oposición fragmentada, ahora se suma el pedido de adelantamiento de las elecciones.
Este martes, la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales (ANGR), que aglutina a los gobernadores de los 24 departamentos, suscribió un documento en el que pide adelantar los comicios presidenciales y legislativos, previstos para 2026. Aseguran que la iniciativa busca primero favorecer la “unidad nacional”.
Castillo llegó al poder hace poco más de un año tras unas ajustadas elecciones y, desde entonces, ha resistido diversos intentos destituyentes, incluyendo dos juicios políticos. Pero sus alianzas políticas se han resquebrajado, los opositores tomaron el control del Congreso y su imagen sigue cayendo en medio de una crisis económica nacional, potenciada por la global. En el medio, debió formar cinco Gabinetes, por la censura a varios de sus ministros, algunas renuncias intempestivas e incluso el propio mandatario echó a funcionarios que intentaron investigarlo.
En diálogo con la radio local RPP, el gobernador de Cusco y presidente del grupo de gobernadores, Jean Paul Benavente, se refirió a esa reunión realizada el viernes en Arequipa, e indicó: “Uno de los puntos de agenda que hemos planteado en un pronunciamiento es la posibilidad del adelanto de elecciones”.
“Vemos con profunda preocupación lo que está pasando a nivel nacional entre dos poderes del Estado que no dan su brazo a torcer. Nos preocupa esta polarización y, realmente, una probabilidad de convulsión social que nos hace daño; tenemos que sentarnos a la mesa distintas instituciones del Estado con el sector privado para definir el tema”, aseguró.
Asimismo, la ANGR anticipó que en los próximos días realizarán una nueva reunión en Lima, y no se descarta que le lleven la petición al propio Castillo en persona. El primer reclamo será el de llamar a un Gobierno de unidad nacional; y, de fracasar esa instancia, entonces sí creen que debería realizarse un llamado a elecciones anticipadas.
La gran pregunta de los analistas es si el resultado de una potencial elección no exacerbará esa fragmentación política que vive Perú y que dificulta la consolidación de cualquier Gobierno, tal como viene sucediendo en la última década.