Justo un día antes de la visita del nuevo presidente de Israel a su homólogo estadounidense, Joe Biden, en la Casa Blanca, Estados Unidos aprovechó la oscuridad para llevar a cabo tres ataques aéreos contra blancos iraníes situados a lo largo de la frontera entre Siria e Irak.
Dos de los ataques ocurrieron dentro de la frontera siria, Mitras que el tercero se produjo en territorio iraquí. La noche de este domingo, el pentágono publicó una declaración donde explicó las razones: “Siguiendo las instrucciones del presidente Biden, fuerzas militares estadounidenses realizaron ataques aéreos defensivos de precisión en las primeras horas de esta tarde contra instalaciones utilizadas por milicias apoyadas por Irán en la región fronteriza entre Irak y Siria”, señaló el secretario de prensa del Pentágono, John Kirby.
“Los objetivos se seleccionaron debido a que esas instalaciones son utilizadas por milicias respaldadas por Irán que han participado en ataques con vehículos aéreos no tripulados (VANT) contra personal e instalaciones estadounidenses en Irak. Específicamente, los ataques estadounidenses tuvieron como objetivo instalaciones de operaciones y almacenamiento de armas en dos ubicaciones de Siria y en una en Irak, las cuales se encuentran cerca de la frontera entre esos países.
Varios grupos de milicias apoyadas por Irán, entre los que se encuentran Kata’ib Hezbollah (KH) y Kata’ib Sayyid al-Shuhada (KSS), utilizaban esas instalaciones”. Menos de dos horas después del anuncio del Pentágono, la Casa Blanca publicó el programa de trabajo de Biden para este lunes, en el que se incluye la visita del presidente electo de Israel, Reuven Rivlin.
La reunión está programada para llevarse a cabo alrededor de las cuatro de la tarde en la Casa Blanca. El medio noticioso USA Today informó la tarde del domingo que las milicias iraníes habían lanzado ataques con drones contra instalaciones y edificios utilizados por Estados Unidos y sus aliados por lo menos cinco veces desde abril, de acuerdo con la comandante de la Marina Jessica McNulty.
McNulty añadió que los ataques aéreos ejecutados por Estados Unidos este domingo se calcularon para destruir grupos de milicias que, de acuerdo con la comandante, también dispararon cohetes contra objetivos estadounidenses. “Su eliminación afectará y degradará la capacidad de operación de los grupos de milicias e impedirá la realización de nuevos ataques”, indicó McNulty.
Publicado por: Scott McDonald / Newsweek Internacional