Los estadounidenses tendrán que afrontar la tragedia de las personas que mueren a causa de COVID debido a las celebraciones del Día de Acción de Gracias que fueron en contra de las recomendaciones oficiales, semanas antes de que las vacunas comiencen a implementarse. Los expertos ahora han instado a posponer las fiestas navideñas para evitar un número récord de infecciones y muertes.
Cindy Friedman, de la sucursal de viajes de los CDC (Centros para el Control y la Prevención de enfermedades), dijo que la opción más segura era posponer los viajes de invierno durante las próximas vacaciones y quedarse en casa, al igual que durante el Día de Acción de Gracias. Agregó que el volumen de viajes durante el Día de Acción de Gracias fue alto, e incluso si un pequeño porcentaje de esas personas estuvieran enfermas, se traduciría en cientos de miles de infecciones.
Jennifer Dowd , profesora asociada en demografía y salud de la población en la Universidad de Oxford, Reino Unido, dijo a Newsweek: «Todas las muertes son trágicas, pero correr el riesgo de reunirse ahora y luego perder a un miembro de la familia que posiblemente esté a unas semanas de aplicarse una vacuna sería especialmente desgarrador. Nadie quiere que le disparen en las trincheras mientras se firma el tratado de paz «.
Manisha Juthani , profesora asociada de medicina y epidemiología en la Facultad de Medicina de Yale, dijo a Newsweek: «Como médica especialista en enfermedades infecciosas, es extremadamente trágico saber que hay muertes evitables en el horizonte a partir de intervenciones de salud pública que podemos hacer ahora mientras esperamos absorción de vacunas en los próximos meses. No me sorprendería que tengamos más de 3.000 muertes por día en un mes».
Estados Unidos se encuentra en la posición discordante de batir récords de muertes y hospitalizaciones por COVID en medio de promesas de que las vacunas están a semanas de ser implementadas gradualmente.
Para Navidad, esperan ver el equivalente a un 11 de septiembre por día en términos de muertes. Temiendo que la Navidad y otras festividades invernales desencadenarán un patrón similar, instaron a la gente a reconsiderar la celebración como lo harían normalmente.
Juthani dijo: «Lo que hagamos ahora tendrá un impacto más probable en las hospitalizaciones y muertes en enero. El final de diciembre aún puede verse afectado, por lo que nunca es demasiado tarde para marcar una diferencia en la cantidad de vidas salvadas».
«Todas las celebraciones sin máscara en torno a la comida son eventos de alto riesgo que conducirán a una propagación asintomática, casos sintomáticos, hospitalizaciones y muertes», dijo Juthani. Ella continuó: «Las vacunas están en camino. Podemos posponer las reuniones un poco más para que todos podamos comenzar a emerger en algún tipo de normalidad en los próximos meses».
Peter Drobac , médico y especialista en enfermedades infecciosas y salud pública de la Escuela de Negocios Saïd de la Universidad de Oxford, Reino Unido, dijo a Newsweek: «Es trágico [que la gente esté muriendo], sobre todo porque el acceso a vacunas eficaces parece estar muy cerca. La mayoría de estas muertes se podrían prevenir si simplemente comenzáramos a hacer lo básico. Ningún otro país está sufriendo así».
Drobac prosiguió: «No se trata de cancelar la Navidad, se trata de celebrar de manera diferente. Reúnase al aire libre si puede, y con zoom si no puede. Tenga una segunda celebración en la primavera, cuando es más seguro. Seamos inteligentes, solo tenemos que pasar el invierno y las cosas comenzarán a mejorar».
Publicado en colaboración con Newsweek.
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