Han pasado cinco días desde el inicio del conflicto en el gobierno y bandas delictivas en Ecuador y este ya toma un tinte internacional tras el anuncio de Estados Unidos del envío de altos mandos militares para colaborar con el Estado ecuatoriano. Este apoyo podría evitar que se convierta en el primer “narcoestado” de Sudamérica, explicaron analistas a la AFP.
La situación en el país latinoamericano es extrema, con “niveles atroces de violencia y terrorismo”, advirtió este jueves el Departamento de Estado en un comunicado. El escritor y periodista italiano Roberto Saviano, un experto en mafias que vive desde hace años bajo protección policial, habla de “narcogolpe”.
Cómo se convirtió Ecuador en «el país más violento de América Latina»
Dice: “El objetivo del narcogolpe no es tomar el poder, no es administrar con sus hombres ni controlar el Estado. Lejos de eso. El narcogolpe quiere aterrorizar al país, restablecer su supremacía sobre el gobierno y obligarlo a negociar”.
Más de una veintena de bandas del narcotráfico, integradas por unos 20,000 miembros, siembran terror en el país desde el domingo 7 de enero en represalia por las políticas de mano dura del gobierno del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, para doblegarlos.
Desde entonces los motines en las cárceles no ceden, 178 funcionarios de prisiones permanecen como rehenes dentro de las penitenciarías y en las calles cada tanto estallan artefactos explosivos, arden vehículos y suenan disparos.
EL COMANDO SUR ENTRA EN ACCIÓN
La ola de violencia interna que ha dejado 16 muertos provocó la solidaridad de la comunidad internacional, pero también roces con algunos países. Estados Unidos enviará a la jefa del Comando Sur, la general Laura Richardson, y a altos cargos antinarcóticos y diplomáticos a Ecuador para asesorar al presidente Noboa.
Daniel Noboa, presidente de Ecuador, aseguró que «se acabaron los gobiernos tibios»
“Hemos aceptado el apoyo de Argentina, hemos aceptado el apoyo de los Estados Unidos (…) no es momento de, por ego o vanidad, decir que no”, dijo el mandatario de 36 años. “Necesitamos apoyo militar en fuerza de personas, de soldados. Asimismo, como asistencia en inteligencia, artillería y equipamiento”, añadió.
Brasil, Colombia, Chile, Venezuela, República Dominicana, España, la Unión Europea, la ONU, entre otros, rechazaron la arremetida narco. Francia y Rusia advirtieron a sus ciudadanos que no viajen a Ecuador. Y sus vecinos Perú y Colombia, los mayores productores de cocaína del mundo, tomaron medidas para restringir el paso en sus fronteras.
En Ecuador los narcos usan las prisiones como oficinas criminales desde donde gestionan el tráfico de droga, ordenan asesinatos, administran los réditos del crimen y pelean a muerte con rivales por el poder. En medio de la actual crisis Noboa anunció la “repatriación” de 1,500 colombianos presos para mermar el hacinamiento en las cárceles donde hay unas 3,000 personas de más.
EL GERMEN CARCELARIO
Pero la media cayó mal en el gobierno izquierdista de Gustavo Petro que la considera una “expulsión masiva” y problemática pues los presos quedarían en libertad del otro lado de la frontera. La zona limítrofe fue militarizada el miércoles para evitar el paso de criminales.
La actual ola de violencia también empezó en una cárcel, cuando uno de los capos más temidos desapareció de su prisión en Guayaquil: Adolfo Macías, alias “Fito”. Este hombre es el jefe de la principal banda criminal del país conocida como Los Choneros y señalado de haber amenazado al presidenciable Fernando Villavicencio días antes de su asesinato a disparos. El gobierno reaccionó con presión militar y policial, pero el narco respondió sin piedad.
Tras varios días de confinamiento por el miedo, la actividad en las principales ciudades ha ido reanudándose. La mayoría de los comercios abrieron, el transporte público volvió a circular y solo algunas empresas mantienen el teletrabajo. Por ahora se espera la llegada de los mandos militares estadounidenses a Ecuador para el combate al narcotráfico.
A lo largo de la semana han circulado videos en redes sociales sobre crueles asesinatos de miembros de la fuerza pública, presuntos robos y ataques.
Publicado en cooperación con Newsweek en Español