El juez federal del los EEUU John Sinatra hizo lugar a una medida solicitada por grupos religiosos y de defensa del uso de armas, quienes pedían eliminar la prohibición del estado de Nueva York de portar armas de fuego en “lugares de culto”, como «bares, bibliotecas, escuelas, servicios públicos y hospitales» o incluso en Times Square.
El magistrado bloqueó de manera temporal esa normativa, que apunta a controlar el uso de armas en espacios públicos, en un contexto de crecimiento de los atentados y crímenes masivos en el país, y en medio de una discusión que divide a la sociedad y a la política.
Sinatra hizo lugar al reglamos de estos grupos, que tienen un fuerte poder de lobby a nivel federal, avalados por buena parte del Partido republicano, incluyendo al expresidente Donald Trump, y suspendió la prohibición
Esta normativa local había entrado en vigencia el 1° de julio, luego de que el 23 de junio la Corte Suprema (hoy con un perfil conservador) anulara las leyes que limitaban el acceso de las personas a las armas y devolvía ese poder a los estados, tal como ocurrió con el derecho al aborto.
En vistas de ese escenario, Nueva York emitió una legislación bastante restrictiva, en la que el ciudadano que deseara obtener la portación debía demostrar «buen carácter moral», lo que incluye un examen de sus redes sociales, la presentación de al menos cuatro referencias personales y sumar una base de 18 horas de entrenamiento. En esa misma norma se determinaban aquellos “lugares sensibles” a los que no se podían llevar las armas, ya se es estuches, bolsillos o bolsos .
Luego de su puesta en marcha, un juez había opinado que se trataba de una medida “ilegal” por ser demasiado costosa y amplia, al tiempo que consideraba que no era necesaria en lugares como Times Square.
Amparado en una ley restrictiva que avanza en el Congreso y es impulsada por Joe Biden, el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, inició una fuerte campaña este fallo, instalando carteles en la ciudad que declaran a Times Square como “Zona Libre de Armas».
En apoyo, la gobernadora del estado, Kathy Hochul (también demócrata), aseguró: “Seguiré haciendo todo lo que esté a mi alcance para combatir la epidemia de la violencia armada y proteger a los neoyorquinos”.
