Aunque al final de 2021 las fiestas decembrinas parecían un poco más habituales que el año pasado, la variante ómicron encendió las alarmas en todo el mundo y provocó que varios festejos fueran cancelados.
Los contagios de covid-19 batieron récords durante la última semana y alcanzaron una media de 1 millón 45,000 nuevos casos diarios. Esta cifra representa un 46 por ciento más que la semana anterior, según información proporcionada por la AFP con base en sus balances oficiales.
La cifra mortuoria de la pandemia que se inició en marzo de 2020 es ahora de 5.4 millones de víctimas. Además, la pandemia colapsó los sistemas económicos alrededor del globo y confinó a la sociedad por meses para evitar nuevos brotes de contagios.
Sin embargo, aunque la nueva variante ómicron no ha incrementado los decesos y los síntomas son más leves, ha generado preocupación en cuanto a su rápida capacidad de infección. Las muertes por covid-19 han disminuido desde hace tres semanas.
Diversas naciones han optado por imponer nuevamente las restricciones sociales y los protocolos de seguridad sanitaria. En Grecia, el ministro de Salud, Thanos Plevris, ordenó que bares y restaurantes cerraran a medianoche y “la música estará prohibida”, con el fin de evitar aglomeraciones.
Asimismo, Grecia contabilizó un nuevo máximo de casos por día este miércoles. Francia, Reino Unido y España también han roto récords de contagios diarios en los últimos días.
En España, las grandes ciudades se quedaron sin festejos públicos, salvo la capital, donde se programó una celebración de solo 7,000 personas, una tradición que normalmente reunía a casi 18,000. En París, bares y discotecas deberán terminar actividades a las 2 de la madrugada, a lo cual se suema el uso obligatorio de cubrebocas en exteriores para los mayores de 11 años.
Mientras tanto, las celebraciones de año nuevo en Ciudad de México y São Paulo fueron canceladas debido al brote de contagios.
En Río de Janeiro usualmente se reunían más de 3 millones de personas en la playa de Copacabana, pero este año no se celebrarán conciertos. Y la costumbre de lanzar fuegos artificiales será realizada en varias partes de la ciudad para evitar conglomeraciones.
El repunte de contagios en Reino Unido orilló a generar nuevas estrategias para evitar la saturación de hospitales. Por ejemplo, se implementó una campaña de recintos de salud temporales para un posible exceso de pacientes.
En el hemisferio oriente del planeta las restricciones han sido más radicales. Indonesia informó que, debido a los más de 4.2 millones de contagios, los viajeros extranjeros serán deportados si no siguen las medidas sanitarias durante las fiestas decembrinas.
Jamaruli Manihuruk, jefe de la oficina de inmigración de Bali, dijo sobre los turistas: “Prepárense para ser expulsados”. Como Brasil, ha prohibido fuegos artificiales, reuniones de más de 50 personas y carnavales de cualquier tipo.
El director de la OMS, Tedros Adhanom, reveló que tiene una preocupación sobre que “ómicron, al ser más transmisible y circular al mismo tiempo que delta, esté provocando un tsunami de casos”.
“Los sistemas de salud están al borde del colapso”, admitió el director.
En cuanto al continente americano, Estados Unidos también descubrió un alza preocupante de contagios al alcanzar un máximo histórico de más de 265,000 casos por día. En América Latina y el Caribe los enfermos alcanzan la cifra de 47 millones y decesos de 1.6 millones de víctimas.
Y en China, país donde se originó la pandemia, los 13 millones de residentes de la comunidad de Xi’an se encuentran confinados en sus hogares. Los habitantes han levantado quejas por la falta de alimentos.
Una residente de apellido Wang indicó que vive con “un tazón de avena todos los días” solo para mantenerse “con vida”.
Publicado en cooperación con Newsweek México