El Programa Mundial de Alimentos (PMA), auspiciado por la agencia alimentaria de las Naciones Unidas, ganó el viernes el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos para combatir el hambre y mejorar las condiciones para la paz en las zonas afectadas por un conflicto.
La organización, con sede en Roma, afirma que ayuda a unos 97 millones de personas en unos 88 países cada año y que una de cada nueve personas en todo el mundo todavía no tiene suficientes recursos para comer.
1 de cada 11 personas en el mundo sufrían en 2019 de manera crónica la falta de alimentos.
«La necesidad de solidaridad internacional y cooperación multilateral es más evidente que nunca», dijo en una rueda de prensa la presidenta del Comité Noruego del Premio Nobel, Berit Reiss-Andersen.
El director ejecutivo del PMA, David Beasley, aseguró sentirse «profundamente honrado». «Estamos profundamente honrados de recibir el Premio Nobel de la Paz. Es un formidable reconocimiento al compromiso de la familia del PMA, que cada día trabaja para erradicar el hambre en más de 80 países», escribió en Twitter.
Es el duodécimo Nobel de la Paz concedido a una organización o personalidad de la ONU o vinculada con Naciones Unidas, informó la agencia de noticias AFP.
El PMA fue fundado en 1961, tiene su sede en Roma y se financia únicamente por donaciones voluntarias. Se autodefine como «la mayor organización humanitaria» en un mundo donde 690 millones de personas, es decir una de cada 11, sufrían en 2019 de manera crónica la falta de alimentos, situación que se vio agravada este año por el impacto de la pandemia de coronavirus.
En total, 211 individuos y 107 organizaciones eran candidatos al Nobel de la Paz para la actual edición.
El galardón está valorado en diez millones de coronas suecas, equivalente a 1,1 millones de dólares, y será entregado en Oslo el 10 de diciembre.