Por Thomas Westerhold, de Newsweek
El cofundador de WWE (una de las más populares ligas de lucha libre), Vince McMahon, está acusado de abusar y traficar sexualmente con una exempleada en una demanda presentada el jueves.
En la demanda, Janel Grant, exempleada de WWE, alega que McMahon, de 78 años, la trajo a la empresa con promesas de que su carrera mejoraría antes de explotarla y utilizar las experiencias sexuales con ella como una forma de atraer talento.
La demanda civil, que fue presentada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito de Connecticut y obtenida por Newsweek, nombra a McMahon y al ex jefe de relaciones con talentos de la WWE, John Laurinaitis. Busca anular un acuerdo de confidencialidad (NDA) firmado por Grant en 2022, así como daños financieros no especificados. No se han presentado cargos penales contra McMahon o Laurinaitis en este momento.
Newsweek se comunicó con representantes de McMahon y la WWE por correo electrónico y se comunicó con Laurinaitis a través de las redes sociales para solicitar comentarios.
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La demanda contiene descripciones gráficas de agresión sexual, algunas de las cuales se describen a continuación. La demanda acusa a McMahon y Laurinaitis de agredir sexualmente y traficar a Grant durante años.
Grant alega que en junio de 2021, McMahon y Laurinaitis la encerraron en una oficina y la agredieron sexualmente con el personal que trabajaba afuera, diciéndole que «No significa sí» mientras ella les «rogaba» que pararan.
Según la demanda, la WWE estaba consciente del abuso e «intentó esconder el asunto debajo de la alfombra».
McMahon también envió a Grant a Laurinaitis al comienzo de la jornada laboral para tener relaciones sexuales en la habitación del hotel del ejecutivo, alega la demanda, y agrega que Grant le dijo a McMahon que ella salió del hotel «sintiéndome mal conmigo misma todo el tiempo».
La demanda también incluye capturas de pantalla de los mensajes de texto que McMahon supuestamente le envió a Grant, incluido uno en mayo de 2020 que decía: «Soy tu único que es dueño y controlo quién tiene relaciones contigo».
Según la demanda, McMahon frecuentemente compartía fotos de desnudos y videos explícitos de Grant sin su consentimiento como entretenimiento para otros empleados, y él se jactaba ante ella de que tenía un «club de fans». McMahon le recordaba con frecuencia a Grant que el contenido explícito estaba muy extendido, y una vez le dijo que «a estas alturas miles de hombres te ven todos los días en todo el mundo. Todos quieren joderte», alega la demanda.
Según la demanda, Grant se encontraba en una situación financiera difícil en 2019 y necesitaba trabajo. El administrador del edificio de su apartamento le presentó a McMahon y en junio de 2019 la contrataron para un puesto que McMahon creó específicamente para ella dentro del departamento legal. La demanda alega que McMahon inicialmente la presionó para que realizara actividades sexuales y que él le advirtió que mantuviera esas actividades en secreto.
En 2020, según la demanda, McMahon comenzó a utilizar Grant como una forma de atraer talento. Se alega que le ordenó a Grant que creara contenido sexual para un artista de la WWE que la liga quería volver a contratar en julio de 2021.
La demanda dice que Grant comenzó a tener ataques de pánico debido a la naturaleza cada vez más violenta de las instrucciones de McMahon. En 2021, alega la demanda, McMahon le envió un mensaje de texto a Grant: «Quiero llevarte cada vez más abajo. Tan bajo que vas a rogarme que te venda».
Según la demanda, McMahon presionó a Grant para que firmara su acuerdo de confidencialidad a cambio de 3 millones de dólares. Después de que ella firmó y él le pagó $1 millón, dejó de hacer pagos y continuó abusando sexualmente de ella. La demanda alega que intentó traficarla con una estrella de la WWE nuevamente en marzo de 2022 después de que se firmara el acuerdo de confidencialidad.
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Según la demanda, la relación de Grant con McMahon la dejó «lisiada, tanto física como mentalmente, incluso por síntomas debilitantes de trastorno de estrés postraumático e ideas suicidas».
La WWE reveló 19,6 millones de dólares en pagos no registrados de McMahon en 2022, según una presentación ante la SEC. McMahon recibió una citación del gran jurado en 2023, pero no se han presentado cargos penales. McMahon negó cualquier «hecho intencional» y expresó confianza en que la investigación federal se resolverá.
Publicado en cooperación con Newsweek
