La administración del presidente Joe Biden está tratando de distanciarse de la Casa Blanca de Trump de distintas maneras, entre ellas, mediante la diplomacia con Irán. Pero el nuevo liderazgo de Estados Unidos ha informado a Newsweek que una opción militar permanece sobre la mesa en caso de que las conversaciones fracasen y surja una confrontación.
Un funcionario iraní también expresó a Newsweek las esperanzas de su país de volver a la diplomacia, pero advirtió que su país estaba preparado para responder a cualquier ataque.
Incluso en las primeras semanas de la administración Biden, hay mucho en juego en las relaciones Washington-Teherán. Irán busca acelerar el regreso de Estados Unidos a un acuerdo nuclear de 2015 abandonado por el ex presidente Donald Trump, cuya agresiva campaña de «máxima presión ha fallado», según dijo el vocero del Departamento de Estado, Ned Price, en un comunicado enviado a Newsweek. «Irán ha acelerado su programa nuclear e intensificado sus actividades regionales».
En lugar de continuar por el camino forjado por Trump, Price explicó que Biden y el secretario de Estado Antony Blinken vieron las negociaciones como la mejor manera de promover los intereses de los Estados Unidos y naciones afines.
«El presidente y el secretario de Estado están decididos a reanudar la diplomacia como un medio más eficaz para lograr nuestros objetivos«, dijo Price. «En cuanto a los detalles de cómo se puede lograr esto, tenemos la intención de consultar de cerca con el Congreso, nuestros aliados y socios».
Pero si este nuevo camino termina en hostilidades, Price dijo que el presidente estaba listo para pasar del Departamento de Estado al Pentágono.
«Dicho esto, si Irán opta por reducir el espacio para la diplomacia confrontando a Estados Unidos, nadie debería tener la menor duda de que estará preparado para defender a las tropas estadounidenses y sus intereses vitales, incluso con la fuerza adecuada», dijo Price. «Ciertamente esperamos que no llegue a eso, pero el presidente nunca dudará en cumplir con sus responsabilidades como comandante en jefe».
En respuesta a los comentarios de Price, la misión permanente iraní ante el vocero de las Naciones Unidas, Alireza Miryousefi, dijo que su país rechazaba tal conflicto. Al mismo tiempo, dijo que la República Islámica estaba preparada para responder a cualquier ataque, como lo demostró el ataque con misiles de represalia que siguió al asesinato por parte de la administración Trump del alto comandante de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria iraní, el mayor general Qassem Soleimani, el año pasado.
Manifestantes iraquíes levantan pancartas del comandante iraquí Abu Mahdi al-Muhandis (centro), comandante iraní de la Guardia Revolucionaria Qassem Soleimani (izquierda) y líder supremo de Irán Ayatollah Ali Khamenei (derecha). El asesinato de Soleimani continúa marcando las complicadas relaciones entre Washington y Teherán. Foto: AHMAD AL-RUBAYE/AFP/Getty Images/Gentileza Newsweek
«Irán no está interesado en una confrontación militar con Estados Unidos», dijo Miryousefi a Newsweek. «Sin embargo, hemos demostrado, incluso durante la anterior administración de Estados Unidos, que estamos decididos a responder enérgicamente a cualquier acto de agresión contra nuestro territorio e intereses».
Los comentarios se producen días después de que el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, emitiera una oferta para romper el aparente estancamiento sobre las posibles discusiones entre Estados Unidos e Irán. Ambos países habían estado insistiendo en que el otro primero debía volver a cumplir con el acuerdo nuclear conocido oficialmente como Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA).
Pero en una entrevista el lunes con CNN, Zarif sugirió un nuevo camino a seguir. Sugirió que el Alto Representante de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Josep Borrell, quien preside la Comisión JCPOA que también incluye a China, Francia, Alemania, Irán, Rusia y el Reino Unido, podría «coreografiar las acciones que deben tomar los Estados Unidos y el acciones que deben ser tomadas por Irán».
Afirmó que los monitores habían verificado el cumplimiento por parte de Irán del tratado y que el problema estaba en Estados Unidos.
«Claramente, las acciones que toma Irán siempre han sido monitoreadas y certificadas por la AIEA y hemos demostrado que cumplimos nuestras promesas», dijo Zarif en ese momento. «El lado que no ha podido demostrar que cumple sus promesas ha sido Estados Unidos, y como dije, Estados Unidos tiene que demostrar su buena fe, nosotros ya hemos probado nuestra buena fe«.
Dijo que el mayor enriquecimiento de uranio de Irán fue una respuesta a las duras sanciones impuestas por Estados Unidos. «Si nos alejamos de las estrictas limitaciones del acuerdo nuclear es porque Estados Unidos trató de imponer una guerra económica total a Irán«, dijo Zarif. «Ahora, si se detiene eso, volveremos a cumplir plenamente».
Durante una conferencia de prensa al día siguiente, Price no se comprometió con la propuesta de Zarif y dijo que Irán estaba «muy lejos» de cumplir con los criterios establecidos por Estados Unidos para las conversaciones. El miércoles, le dijo a Newsweek que la posición de la administración Biden no ha cambiado.
«Como han dicho el presidente y el secretario Blinken, si Irán regresa en estricto cumplimiento de sus compromisos bajo el JCPOA, Estados Unidos también lo haría para construir un acuerdo más largo y más fuerte que también aborde otros áreas de preocupación», dijo Price.
Dijo que la principal preocupación de Biden y Blinken seguía siendo la capacidad nuclear potencial de Irán, argumentando que «están comprometidos a garantizar que Irán no adquiera una bomba nuclear» y que el presidente «cree que la diplomacia, en coordinación con nuestros aliados, es la mejor». camino para lograr ese objetivo «.
Pero nuevamente enfatizó que esto tomaría algún tiempo para lograrlo y verificarlo, dados los errores de la pasada administración. Irán ha suspendido los límites al enriquecimiento de uranio en respuesta al fracaso de las partes occidentales del JCPOA para normalizar los lazos comerciales. Una medida que, según el país, es permisible según la resolución 2231 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
«En este punto, Irán ha tomado una serie de medidas nucleares muy preocupantes que han reducido significativamente el tiempo de fuga de lo que era el caso al final de la administración Obama-Biden», dijo Price. «Esos pasos deben revertirse». Acusó a Irán no solo de perseguir un arma de destrucción masiva, sino de poner en peligro la seguridad regional con actividades malignas.
«Un Irán con un arma nuclear o en el umbral de tener un arma nuclear sería más peligroso cuando se trata de apoyo al terrorismo, apoyo a sus socios y apoderados, y desestabilización de la región», dijo Price.
Irán, sin embargo, siempre ha negado buscar un arma nuclear y, de hecho, ha impuesto restricciones religiosas en forma de una fatwa de larga data emitida por el líder supremo, el ayatolá Ali Khamenei. Miryousefi citó esta decisión en su rechazo a la narrativa de Price.
«Irán nunca ha perseguido armas nucleares, ya que está contra el Islam, como ha declarado el líder supremo de la revolución islámica en una fatwa», dijo Miryousefi. «Cualquier afirmación de lo contrario es claramente falsa».
Y así, la problemática saga del JCPOA ha continuado en los primeros días de la administración Biden, sin que ninguna nación esté dispuesta públicamente a cambiar su postura mientras las sanciones unilaterales estadounidenses continúan causando estragos en la economía iraní.
«Estados Unidos está en clara violación de sus obligaciones bajo el JCPOA y la UNSCR 2231», dijo Miryousefi. «Irán siempre ha apoyado una diplomacia genuina para recuperar la plena implementación del JCPOA. Hemos dicho una y otra vez que si Estados Unidos regresa al pleno cumplimiento de sus obligaciones y levanta las sanciones ilegales contra nosotros, Irán volverá al pleno cumplimiento de su obligaciones».
Mientras tanto, los legisladores conservadores iraníes están presionando al presidente iraní Hassan Rouhani para que se aleje más del JCPOA en sus últimos meses en el cargo. Eso deja incierto el futuro del acuerdo incluso si la administración Biden se comprometiera con Teherán, una posibilidad que Price dejó abierta: en las circunstancias adecuadas. «Estados Unidos está listo para recorrer el camino de la diplomacia si Irán toma medidas para demostrar que también está listo», dijo Price.
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek
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