Los ministros de Asuntos Exteriores de Francia, Jean-Noël Barrot, y de Alemania, Annalena Baerbock, viajaron a Siria para manifestarle el apoyo de Europa al nuevo Gobierno tras el derrocamiento de Bashar Al-Assad.
Ambos funcionarios se encuentran en Damasco, la capital del país, donde se iban a reunir con Abu Mohammed al-Jolani, líder de los rebeldes que tomaron el poder, en representación de la Unión Europea.
“En Siria, queremos promover una transición pacífica y exigente al servicio de los sirios y de la estabilidad regional”, expresó Barrot en su cuenta de X sobre este viaje.
Por su parte, Baerbock manifestó el apoyo para que haya “una transferencia de poder inclusiva y pacífica” para reconstruir el país, que tras el fin del régimen de Al-Assad “alberga esperanzas justificadas de que el futuro será mejor”.
Siria: el líder de los rebeldes se reunió con un enviado de la ONU para analizar el futuro del país
“Por parte de la UE se da una señal clara: es posible un nuevo comienzo político entre Europa y Siria, entre Alemania y Siria. Viajamos hoy a Damasco con la oferta de nuestro apoyo, pero también con claras expectativas de los nuevos gobernantes. Un nuevo comienzo sólo podrá producirse si a todos los sirios, independientemente de su grupo étnico o religioso, se les da un lugar en el proceso político”, expresó en sus redes sociales.
Desde el Gobierno de transición sirio han manifestado su postura de que el país tenga una mejor relación internacional. De hecho, tras el derrocamiento de Al-Assad varios representantes de países árabes y de occidente han visitado el país.
El líder de Siria anticipó que podría tomar cuatro años llevar a cabo elecciones en el país
Barrot y Baerbock son los primeros de la diplomacia europea en viajar allí. Incluso, visitaron la prisión de Sednaya, al norte de Damasco, a la que consideraron un “símbolo de los peores crímenes del régimen de Bashar Al-Assad”.
Sin embargo, Abu Mohammed al-Jolani aún mantiene el reclamo de que la Unión Europea, Estados Unidos y otros países levanten las sanciones contra el país y deje de reconocer a la agrupación Hayat Tahrir al Sham (HTS) como grupo terrorista.