Expertos de la ONU expresaron este lunes su “gran preocupación” por las numerosas acusaciones de abusos sexuales contra menores en instituciones católicas y pidieron al papa que actúe. En una carta dirigida a la Santa Sede en abril de 2021, los expertos expresaron “la máxima preocupación por las numerosas denuncias” y por las medidas adoptadas por la Iglesia católica para proteger a los presuntos abusadores, encubrir los delitos, obstruir la rendición de cuentas y eludir las reparaciones debidas a las víctimas.
Los expertos aseguran que “los concordatos y otros acuerdos negociados por la Santa Sede con los Estados limitan la capacidad de las autoridades civiles para interrogar, obligar a presentar documentos o procesar a personas relacionadas con la Iglesia Católica”. Por lo que señalaron en la carta: “instamos a las autoridades de la Santa Sede a que se abstengan de realizar prácticas obstruccionistas y a que cooperen plenamente con las autoridades”.
También plantearon su preocupación por la presión ejercida para mantener la prescripción que impide a las víctimas denunciar los delitos cuando llegan a la edad adulta, cuando están más capacitadas para denunciar ante los tribunales el daño que han sufrido. Según la misiva, todo ello ha conducido “a la impunidad de los delitos cometidos, la repetición de las violaciones durante décadas y al aumento del número de víctimas, así como a la falta de reparación y apoyo a las víctimas”.
La carta fue enviada el 7 de abril pero fue hecha pública este lunes y está firmada por cuatro expertos, entre ellos los relatores especiales sobre tortura y sobre venta y explotación sexual de niños.
La misiva también señala que uno de los relatores envió una carta anterior, el 2 de abril de 2019, en la que se refería a casos de abuso y explotación sexual cometidos por clérigos en Australia, Estados Unidos, Polonia, Irlanda y Holanda, entre otros.
“Queremos expresar nuestra preocupación por la falta de respuesta” del Vaticano, subrayan los cuatro expertos. La carta en esta ocasión menciona casos similares en Alemania, Bélgica, Francia, Chile, México, Argentina y Colombia.
También cita el caso de los internados religiosos para niños nativos en Canadá, el hallazgo de los restos de 215 niños aborígenes en el emplazamiento de una de estas instituciones en la Columbia Británica (oeste de Canadá). “Aunque algunas investigaciones han sido iniciadas por el Vaticano o por diócesis locales o nacionales, los informes apuntan a intentos persistentes por parte de la Iglesia Católica de proteger a los presuntos abusadores de la justicia secular”, dicen los expertos.
Además piden al papa que tome todas las medidas necesarias para poner fin a estas violaciones y evitar “que se repitan”. También expresan su “preocupación por los continuos intentos de miembros de la iglesia de socavar los esfuerzos legislativos para mejorar la justiciabilidad de la violencia sexual contra los niños en las jurisdicciones nacionales” y denuncian el “lobby de miembros de la Iglesia para preservar la prescripción de estos delitos”.
Con información de AFP
Publicado en cooperación con Newsweek/ Published in collaboration with Newsweek