El arzobispo emérito sudafricano Desmond Tutu, también premio Nobel de la Paz en 1984, falleció hoy domingo por la mañana en Ciudad del Cabo, la capital legislativa de Sudáfrica, a los 90 años de edad, según anunció la Fundación para el Legado de Desmond y Leah Tutu.
Nacido en octubre de 1931, Tutu se convirtió en un profeta para la justicia de los líderes políticos en la cárcel y en el exilio durante la época del apartheid, al fungir como secretario general del Consejo de Iglesias de Sudáfrica y, más tarde, arzobispo anglicano de Ciudad del Cabo, recordó la fundación en un comunicado, a través del cual también encomió su resistencia contra el régimen del apartheid.
La fundación aprovechó para realzar el papel de Tutu en la transición democrática y reconciliación de Sudáfrica tras las primeras elecciones sin consideraciones raciales celebradas en el país en 1994, siendo presidente de la Comisión de Verdad y Reconciliación, creada por el Gobierno para abordar lo ocurrido bajo el régimen del apartheid.
Tutu, continuó la fundación, pasó sus últimos años de vida con una creciente dedicación a la oración y la contemplación en su casa en Ciudad del Cabo, junto a su esposa Nomalizo Leah Tutu.
En nombre de todos los sudafricanos, el presidente del país, Cyril Ramaphosa, expresó su tristeza por el fallecimiento de Tutu mediante un comunicado emitido por el ministro de la Presidencia, Mondli Gungubele.
El deceso de Tutu siguió al de Frederik Willem de Klerk, otro galardonado con el premio Nobel de la Paz y el último presidente del «apartheid», quien murió en noviembre pasado en Ciudad del Cabo.
La muerte de Tutu es «otro capítulo de pérdida» en el adiós del país a «una generación de destacados sudafricanos que nos legaron una Sudáfrica liberada», dijo Ramaphosa, alabándolo por su lucha contra las «fuerzas del apartheid» y su compasión por aquellos que sufrieron bajo ese régimen.
La Fundación Nelson Mandela recordó en un comunicado la amistad entre Tutu y el primer presidente de raza negra en el país.
Nelson Mandela, quien compartió con De Klerk en 1993 el premio Nobel de la Paz, y calificó a Tutu de «un hombre responsable» por los demás, palabras que el arzobispo utilizó para describir a Mandela cuando este último falleció en 2013.
Fuente: www.noticiasargentinas.com