Faltan tres semanas para el día de las elecciones, cuando Estados Unidos decidirá si Donald Trump o Kamala Harris será el próximo presidente de Estados Unidos. Las encuestas sugieren que la carrera hacia la Casa Blanca será increíblemente reñida, y ambos candidatos están considerando caminos factibles para la victoria.
Los columnistas de Newsweek declaran quién creen que ganará y por qué. Además, puede dar su opinión con el formulario de comentarios a continuación y votar en nuestra encuesta.
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DARVIO MORROW: DONALD TRUMP
En una elección tumultuosa con grandes oscilaciones de un lado a otro, parece que el expresidente Donald Trump tiene la ventaja a medida que se acerca la elección. La campaña de la vicepresidenta Kamala Harris ha cometido dos errores críticos. Uno, no logró definir a Kamala desde el principio. Grandes sectores de los votantes todavía dicen que no saben quién es ella. Segundo, intentaron cuidar su ventaja inicial en lugar de avanzar agresivamente en su posición. Como resultado, han permitido que la carrera vuelva a lo que originalmente era: una carrera reñida con una ligera pero duradera ventaja de Trump. Todo puede pasar, pero por ahora Trump tiene las de perder.
(Darvio Morrow es el director ejecutivo de la cadena de radio FCB)
DAVID FARIS: KAMALA HARRIS
Desde agosto, Kamala Harris ha mantenido una pequeña pero persistente ventaja en las encuestas nacionales. Con ventajas estrechas pero consistentes en apenas suficientes estados para cruzar el umbral de los 270 votos electorales en noviembre, Harris tiene más probabilidades de ganar que no. Pero su campaña cautelosa y conservadora, su negativa a distanciarse de Biden en cuestiones como la inmigración y su plataforma política en gran medida poco imaginativa mantienen a Trump en la carrera. Incluso un modesto error de sondeo según los estándares recientes o un evento imprevisto podría impulsar a Trump a la victoria a menos que Harris encuentre una manera de ampliar aún más su atractivo con solo tres semanas por delante.
(David Faris es profesor asociado de la Universidad Roosevelt)
BETHANY MANDEL: DONALD TRUMP
En las últimas dos semanas, hemos visto que el impulso de las encuestas se alejaba de la vicepresidenta Kamala Harris. El mapa del Colegio Electoral del RCP muestra a Donald Trump por delante en seis de las siete elecciones en disputa. Los números son demasiado cercanos para darles mucha importancia, así que centrémonos en las vibraciones que cada campaña está emitiendo. Durante la última semana, Harris y Walz han estado haciendo rondas en los medios y en los nuevos medios, cambiando drásticamente su estrategia de comunicaciones. No se hace eso si la estrategia actual está funcionando. ¿Cómo fue? Hasta Saturday Night Live se está burlando de los resultados. Trump sigue celebrando mítines entusiastas, y JD Vance está arrasando con todos los presentadores de los medios tradicionales que se atreven a enfrentarse al candidato a vicepresidente. Esta es una elección de vibraciones, y las vibraciones no se ven muy bien para los demócratas.
(Bethany Mandel es coautora de Stolen Youth)
THOMAS MOUKAWSHER: KAMALA HARRIS
Kamala Harris será la próxima presidenta de los Estados Unidos. Si la prueba es «es la economía, estúpido», Harris gana. El mercado de valores está en alza. El desempleo y la inflación han bajado, pero en realidad estas elecciones se trata de votar contra Donald Trump. Antes de que el presidente Biden se retirara de la contienda, muchos estadounidenses pensaban que tendrían que vivir con Trump porque no tenían una alternativa competente. La consiguieron con Harris. Ahora pueden votar contra Trump, un mentiroso, estafador, violador e insurgente. Harris no les ha dado a los estadounidenses nada que temer, pero con Trump, los estadounidenses tienen todo que perder.
(Thomas Moukawsher es un juez jubilado y autor)
MATT ROBISON: DONALD TRUMP
Imagínese presentarle esto a un estudio de Hollywood: un expresidente que fue sometido a dos juicios políticos, fracasó en la lucha contra el COVID, tuvo el peor historial de empleo de la historia moderna, anuló el fallo Roe, deslocalizó la producción, incitó a una insurrección y ahora propone un plan que aumentaría la inflación, pero que tiene la contienda muerta incluso a tres semanas de la reelección y que ha sido superado en campaña significativamente. Se reirían de usted en la oficina, pero aquí estamos. Los demócratas pueden quejarse de las causas (el lavado de imagen de los medios, la falta de memoria de los votantes, el Colegio Electoral) todo lo que queramos. Pero miren el marcador. El hecho de que Trump tenga esto a un pelo de distancia es notable. Está ganando ahora mismo.
(Matt Robison es escritor, presentador de podcasts y ex miembro del personal del Congreso)
ARON SOLOMON: DONALD TRUMP
Es casi demasiado tentador ser ingenioso con mi respuesta, diciendo algo conciso como: «¡Hasta ahora, la democracia es la ganadora!» Pero me abstendré y daré una respuesta directa: desde donde estamos sentados hoy, parece que Donald Trump está ganando las elecciones. Trump sigue siendo el Don de teflón, a pesar de las condenas por delitos graves, los intentos de asesinato y un oponente que ha demostrado ser históricamente estelar en la recaudación de fondos. Sin embargo, Trump se mantiene firme y ha ganado terreno notable en los sectores de votación hispana y negra, incluso en una semana en la que logró insultar a toda la ciudad de Detroit. Cualquiera que haya apostado a que Trump no ganaría impulso durante el último mes no estaba prestando suficiente atención.
(Aron Solomon es analista legal)
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PATRICK T. BROWN: DONALD TRUMP
Cualquiera que diga que la elección está en el bolsillo de una manera u otra está muy seguro de sí mismo. Pero casi todo lo que el expresidente Trump podría hacer para perder votos activamente está incluido en el presupuesto, y él sigue lanzando propuestas de «No imponer impuestos a [los distritos electorales de los estados clave favorecidos]» a la pared para ver qué se sostiene. Mientras tanto, el globo de la «política de la alegría» se está desinflando lentamente. A menos que ella sea capaz de cambiar la dinámica de la carrera, el riesgo a la baja ahora está firmemente del lado de la vicepresidenta Harris. A menos que haya una gran sorpresa, Trump apenas logrará una victoria en Michigan y Pensilvania, y así recuperará la Casa Blanca.
(Patrick T. Brown es miembro del Centro de Ética y Políticas Públicas)
DOUG GORDON: KAMALA HARRIS
Tres semanas antes del día de la elección, la carrera está empatada, tanto a nivel nacional como en los siete estados en disputa que decidirán el resultado. Sin más debates y con la ventana cada vez más cerrada para una sorpresa de octubre que altere sustancialmente una carrera en la que millones de estadounidenses ya están votando, esta carrera se reducirá a los esfuerzos de las campañas para conseguir que la gente salga a votar (GOTV, por sus siglas en inglés). Una buena campaña GOTV puede hacer que una carrera avance entre un 0,5% y un 1,5%. Y en una elección reñida, como ésta, esa es la diferencia entre ganar y perder. Aquí Harris tiene la ventaja. El camino de Harris hacia la victoria pasa por movilizar a los votantes con alta propensión a votar con una máquina GOTV probada, mientras que Trump está tratando de movilizar a los votantes con baja propensión a votar con una campaña GOTV que ha sido entregada a los estafadores del MAGA. Si a eso le sumamos la importante ventaja financiera de Harris y el trabajo que ha hecho su campaña para socavar las ventajas de Trump en las encuestas sobre la economía y sobre quién representa el cambio, dentro de tres semanas preferiría ser ella que él. Pero la cosa va a estar reñida.
(Doug Gordon, estratega demócrata y director ejecutivo de UpShift Strategies)
Publicado en cooperación con Newsweek Internacional
