Al menos cinco personas murieron y 20 resultaron heridas este sábado en un bombardeo en el centro de Jerson, en el sur de Ucrania, denunció el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que calificó a la ofensiva como un acto de «terror» ruso para «intimidar» a los ucranianos.
«Esto no es contenido sensible, es la vida real de Ucrania. Jerson, en la víspera de Navidad, en la parte central de la ciudad. Es terror, es matar por intimidación y placer», criticó Zelenski en sus redes sociales y subió fotos del lugar del ataque en la que se ven algunos cadáveres tirados en las calles. «El mundo debe ver el mal absoluto contra el que estamos luchando», apuntó.
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Jerson fue la ciudad que el ejército ucraniano recuperó en noviembre, en medio de una exitosa contraofensiva, después de ocho meses de ocupación rusa. Sin embargo, la localidad fue blanco de ataques rusos en las últimas semanas, sobre todo en sus instalaciones energéticas, tal como consignó la agencia de noticias Télam.
Por otro lado, las autoridades impuestas por el Kremlin en la provincia ucraniana de Donetsk acusaron a las Fuerzas Armadas de Ucrania de bombardear la capital con cinco proyectiles lanzados por sistemas lanzacohetes de alta precisión MLRS.
Según un comunicado del Centro Conjunto para el Control y Coordinación del Alto el Fuego (JCCC), el Ejército ucraniano lanzó cinco misiles hacia el distrito de Kievsky de la ciudad de Donetsk.
El lanzamiento tendría lugar un día después de que los distritos de Petrovsky y Kievsky fueron objeto de un presunto bombardeo por parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania, también con el uso de MLRS, con 45 misiles.