Miles de manifestantes irrumpieron hoy en la residencia oficial del presidente de Sri Lanka en Colombo, Gotabaya Rajapaksa, durante una jornada de fuertes protestas para exigir su dimisión en medio de la crisis económica que sufre el país.
La multitud rompió el perímetro de seguridad que rodeaba la residencia oficial a pesar de que la Policía recurrió a gases lacrimógenos para impedir la intrusión. Según una fuente de Defensa, Rajapaksa seguía siendo presidente del país y se encontraba en un lugar secreto protegido por el Ejército.
«El Presidente ha sido escoltado hacia un lugar seguro«, indicaron.
Algunos de los manifestantes compartieron sus videos en vivo dentro del edificio, mostrando a cientos de personas coreando eslóganes en los pasillos y habitaciones.
«Queremos un cambio, queremos que este Presidente se vaya», afirmó a la prensa local Efe Lakmal Perera, un trabajador del sector privado que se encontraba entre los cientos de manifestantes cerca del parque Galle Face Green, epicentro de las protestas en Colombo. «Gotabaya está loco», «Gotabaya tiene miedo» o «Gotabaya vete a casa» fueron algunos de los eslóganes coreados en Sri Lanka.
Ante la caótica situación, el primer ministro, Ranil Wickremesinghe, convocó a una reunión de emergencia a los líderes de los partidos políticos del país y pidió además la convocatoria del Parlamento, informó su oficina en un comunicado.
Esta situación se da en una de las peores crisis económicas que vive Sri Lanka desde su independencia en 1948, derivada de la merma de divisas de reservas internacionales y de un gran endeudamiento. La tensión y el descontento aumentó en la isla a finales de marzo, cuando las autoridades impusieron cortes de luz de más de 13 horas, lo que llevó a la población a salir a las calles para pedir la dimisión del Ejecutivo de Sri Lanka.