El Fondo de Compensación a las Victimas del 11 de Septiembre (VCF) publicó su “Informe especial del 20 aniversario”, en el cual se menciona que murieron más personas de enfermedades relacionadas con el 11/9 de las que se perdieron en los ataques iniciales de 2001.
El 48 por ciento de las personas que pidieron una compensación reportaron tener cáncer, y se halló que el 20 por ciento de aquellos con cáncer tenían una segunda enfermedad que cumplía con los requisitos. Según la Ley “Nunca Olvidemos a los Héroes”, el VCF da fondos a quienes sobrevivieron, perdieron un familiar, respondieron, retiraron escombros subsecuentes o estaban cerca del sitio de exposición el día de los ataques.
El informe declaró que se aprobó al 79 por ciento de quienes presentaron solicitudes de elegibilidad. También mencionó que el fondo ha administrado más de 8,900 millones de dólares a más de 40,000 individuos. En el año financiero de 2021 se presentaron casi 4,700 solicitudes de sobrevivientes, mientras que se recibieron 3,650 de quienes respondieron a la emergencia.
“En las décadas desde el 11/9, decenas de miles de personas que respondieron a la emergencia y sobrevivientes se han enfermado o muerto a causa de la exposición”, escribió Merrick Garland, fiscal general de Estados Unidos, en el informe. “Al conmemorar el 20 aniversario de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 es importante reconocer que aún continúa la tragedia de ese día”.
Una cantidad impactante de 2,974 personas murieron en los ataques al World Trade Center y el Pentágono y en el avión desviado que se estrelló en Pensilvania. Más de 400 de estos individuos eran bomberos y policías de la Ciudad de Nueva York que murieron en el lugar cuando se desplomaron las Torres Gemelas.
El Programa de Salud del World Trade Center de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC) reporta que, en junio de 2021, casi 81,500 personas que respondieron a la emergencia y casi 30,600 sobrevivientes se han matriculado en el programa, el cual da monitoreo y tratamiento médico sin costo a aquellos afectados por el ataque.
Personas de los 50 estados de la Unión Americana participan en el programa de los CDC. El programa reporta que la rinosinusitis crónica, un padecimiento que afecta los senos paranasales, es la enfermedad más común asociada con el ataque, pues casi 27,250 personas que respondieron a la emergencia y casi 6,200 sobrevivientes la han reportado.
Asimismo, más de 24,900 personas que respondieron a la emergencia y casi 5,200 sobrevivientes han reportado enfermedad por reflujo gastroesofágico, un padecimiento que afecta el recubrimiento del estómago. Y más de 14,400 de quienes respondieron a la emergencia y casi 9,300 sobrevivientes reportan cánceres.
Además de los padecimientos antes mencionados, junto con asma, apnea del sueño, enfermedad respiratoria crónica y enfermedad pulmonar obstructiva crónica (epoc), muchos individuos afectados por el ataque han reportado problemas de salud mental. Más de 12,500 sufren de trastorno por estrés postraumático, casi 3,500 sufren de ansiedad y alrededor de 3,400 han sufrido un trastorno depresivo mayor.
“Para muchos, la angustia mental es tan difícil de soportar como los padecimientos físicos”, escribió en el informe Stefanie Langsam, jefa adjunta especial del VCF. “Hay adultos jóvenes —niños pequeños o bebés por entonces— que nunca han conocido una vida sin enfermedades. Pero se toman el tiempo para agradecernos. No podemos cambiar sus circunstancias, pero podemos hacer lo posible para ayudarles a seguir adelante”.
Publicado por: Alex J. Rouhandeh / Newsweek Internacional
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek