Ente miércoles, una llamada alertó a la Policía Metropolitana de Washington sobre la presencia de un posible tirador dentro del complejo del Capitolio de los EEUU, donde funciona el Poder Legislativo y donde trabajan miles de personas.
Hubo un fuerte operativo de seguridad. «Si usted se encuentra dentro de los edificios del Senado, todo el mundo en el interior debe refugiarse en su lugar ya que se reportó un posible tirador activo. Cabe señalar que no tenemos ningún informe confirmado de disparos», fue el mensaje de la Policía del Capitolio a través de las redes sociales.
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Mientras tanto, parte de la planta de empleados fue evacuada y se armó un perímetro en torno al complejo para que las personas no pudieran ingresar mientras las fuerzas de seguridad tomaban el control de la situación e ingresaban para hallar al potencial agresor.
Afortunadamente, el Congreso se encuentra en su receso de verano, y tanto los legisladores como muchos miembros de sus equipos de trabajo no se encontraban en la capital en ese momento.
Poco más tarde, y luego de las tareas de búsqueda, la policía afirmó que todo pareció tratarse de una falsa alarma. “Llegó una llamada por un tirador activo. Parece ser un error. No hubo heridos ni se localizó al tirador», sostuvo Hugh Carew, portavoz del Departamento de Policía Metropolitana de Washington.
De todos modos, se abrió una investigación para determinar el origen de esa llamada y saber exactamente si se trató de una agresión real, con alcance federal.
(Con información de Reuters)
