Por Natalie Venegas, de Newsweek
El Secretario General de las Naciones Unidas enfatizó el lunes la urgencia de un alto el fuego en la guerra entre Israel y Gaza, y dijo que el conflicto había alcanzado un nivel de sufrimiento «sin precedentes», que está más allá de todo lo que ha visto durante sus años en el cargo.
El 7 de octubre, Hamás lideró el ataque palestino más letal contra Israel en la historia. Israel respondió lanzando un ataque sostenido contra Gaza.
La guerra en curso ha dejado al 90 por ciento de la población de Gaza, de 2,3 millones de personas, desplazada, y muchos se han visto obligados a huir de sus hogares varias veces, lo que ha llevado a pedidos de un alto el fuego.
En una entrevista con The Associated Press el lunes, António Guterres dijo: «El nivel de sufrimiento que estamos presenciando en Gaza no tiene precedentes en mi mandato como secretario general de las Naciones Unidas. Nunca he visto un nivel de muerte y destrucción como el que estamos viendo en Gaza en los últimos meses».
Al menos 1.200 personas murieron en el ataque de Hamás contra Israel y aproximadamente 250 rehenes fueron tomados. Alrededor de 120 siguen detenidos, y se cree que alrededor de un tercio de ellos están muertos. Más de 40.900 palestinos han muerto en Gaza, según el Ministerio de Salud de Gaza.
Continúan las negociaciones para un alto el fuego y la liberación de rehenes, y Estados Unidos insta al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a continuar las conversaciones.
Más allá de un alto el fuego, Guterres señaló que una solución de dos Estados para el conflicto israelí-palestino, que dura décadas, no solo es viable, sino que «es la única solución».
«No creo que se pueda tener a dos pueblos viviendo juntos si no están en una base de igualdad y si no están en una base de respeto, respeto mutuo de sus derechos», dijo Guterres. «Por lo tanto, la solución de dos Estados es, en mi opinión, una necesidad si queremos tener paz en Oriente Medio».
Guterres también enfatizó la disposición de la ONU a monitorear cualquier posible alto el fuego. Sin embargo, reconoció los desafíos que supone asegurar la aprobación israelí para cualquier papel significativo de la ONU en Gaza. «La ONU estará disponible para apoyar cualquier alto el fuego», afirmó Guterres, haciendo referencia a la misión de observación militar de la ONU, UNTSO, que lleva mucho tiempo en la región desde 1948. «Por supuesto, estaremos dispuestos a hacer lo que la comunidad internacional nos pida. La cuestión es si las partes lo aceptarían, y en particular si Israel lo aceptaría».
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Netanyahu, que anteriormente prometió desmantelar las estructuras militares y de gobierno de Hamás y asegurar el regreso de los rehenes restantes, ha rechazado un acuerdo de alto el fuego y recientemente se ha opuesto a los llamamientos a una solución de dos Estados.
Esto se produce después de que el gobierno de Netanyahu haya criticado abiertamente los esfuerzos humanitarios de la ONU en Gaza, acusando al organismo internacional de albergar un sesgo antiisraelí.
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El máximo tribunal de las Naciones Unidas declaró previamente que la presencia continua de Israel en los territorios palestinos era «ilegal» e instó al país a cesar de inmediato todos los nuevos asentamientos, evacuar a los colonos y emitir reparaciones, en una opinión consultiva publicada en julio.
En la decisión, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) determinó que Israel está obligado a poner fin a su presencia lo «más rápido posible». La opinión de la CIJ, emitida por un panel de 15 jueces de todo el mundo, incluido uno de los Estados Unidos, carece de medidas de cumplimiento, pero es probable que afecte a la política internacional, especialmente con un mayor escrutinio sobre el Primer Ministro de Israel.
Sin embargo, Netanyahu respondió en una declaración en las redes sociales rechazando las conclusiones del tribunal. «El pueblo judío no es ocupante en su propia tierra, incluida nuestra capital eterna, Jerusalén, ni en Judea y Samaria, nuestra patria histórica. Ninguna opinión absurda en La Haya puede negar esta verdad histórica o el derecho legal de los israelíes a vivir en sus propias comunidades en nuestro hogar ancestral», escribió en X.
Publicado en cooperación con Newsweek
