Mientras el presidente de Perú, Pedro Castillo, resiste un avance del Congreso para destituirlo acusándolo de liderar una red de corrupción, una nueva denuncia sacude a su Gobierno.
Este lunes por la madrugada le pidió la renuncia a su ministro de Salud, Jorge López, luego de que la publicación dominical peruana Punto Final afirmara que el funcionario ordenó a seis colaboradores hacer transferencias públicas directas a una cuenta de su exesposa, Derby Apaza Meza.
“Ante los hechos propalados por un medio de comunicación que involucrarían al actual ministro de Salud, y en aras de demostrar absoluta transparencia en mi Gobierno, he decidido dar por concluida sus funciones. Reitero mi compromiso de seguir trabajando por el país”, tuiteó Castillo pasada la medianoche.
López, que había llegado al cargo hace siete meses en el marco de la última ola de Covid, habría ordenado que se le transfirieran a la madre de sus hijos una suma total 98.400 soles (casi US$ 25.000), en doce transferencias coordinadas presuntamente por Juan Carlos Delgado Echevarría (su jefe de Asesores) y Dayse Gamarra Vera (su asistente). Además, estarían involucrados Lesly Vivar Saavedra (asistente administrativa), César Augusto Roque (de la Oficina General de Administración), Esperanza Coello (coordinadora administrativa), Carlos Sánchez (su chofer) y Pedro Vásquez Espínola, mientras que aún queda por conocer la identidad de un funcionario más.
Ante los hechos propalados por un medio de comunicación que involucrarían al actual ministro de Salud, y en aras de demostrar absoluta transparencia en mi gobierno, he decidido dar por concluida sus funciones.
Reitero mi compromiso de seguir trabajando por el país.— Pedro Castillo Terrones (@PedroCastilloTe) October 24, 2022
A esos casi US$ 25.000 se suma otro depósito por US$ 70.000 a esa misma cuenta. Las realizó un reconocido médico llamado Luis Quito, propietario de una serie de centros de salud en Lima; y la compra de un departamento en la localidad de Jesús María, por 412.000 soles (casi US$ 105.000), provenientes de la cuenta de Apaza Meza.
Actualmente, Castillo enfrenta seis investigaciones por corrupción, tráfico de influencias, abuso de autoridad y hasta el plagio de sus tesis de maestría, pero la ley señala que un presidente no pude ser acusado formalmente por la Justicia ordinaria. La vía es a través del Congreso, y por eso la Fiscalía General presentó una denuncia constitucional que está siendo evaluada por el parlamento, actualmente en manos de la derecha y la centro-derecha.
Castillo ha negado las acusaciones en todo momento, e incluso ha pedido la intervención de la OEA para evitar lo que considera “un golpe de Estado”. Por esas causas está detenida la cuñada del presidente, está imputada su esposa y su sobrino permanece prófugo.