El Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) informó este martes que en 2020 la violencia con armas en el país logró la suba más alta y en paralelo, los crímenes aumentaron un 35% respecto al 2021.
En esa línea, la institución detalló que las heridas por armas de fuego se consideran como una importante afectación de salud pública en el territorio norteamericano. Es por eso, que es clave desarrollar acciones que tengan como objetivo que las personas no mueran por ese motivo.
Frente a ese panorama, Debra Houry, directora adjunta del CDC, precisó que durante 2020, el 79% de los asesinatos y el 53% de los suicidios registrados se llevaron a cabo con armas de fuego.
En ese contexto, Tom Simon, a cargo de la División de Prevención de la Violencia, señaló que el estrés y los cambios producto del arribo del coronavirus. como la cuarentena, las dificultades económicas y los problemas familiares en las casas inciden en la suba de estos números.
«Al ser tratado como un problema de salud pública, los CDC incluyen en su informe medidas y políticas preventivas para tratar de reducirla, como promover programas en los que trabajadores sociales comprometidos con las comunidades, ayuden a cortocircuitar esta violencia», remarcó el profesional.
Sin embargo, acorde con los datos del Archivo de Violencia Armada, hasta el 2 de mayo de este año, se contabilizaron 6.296 asesinatos con arma de fuego, además de 173 tiroteos masivos y 8.052 suicidios.
Fuente: www.noticiasargentinas.com