Los cometarios del ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, sobre Adolf Hitler provocaron indignación en Israel cuando afirmó que el dictador alemán podría haber tenido “sangre judía”. Incluso lo comparó con el propio presidente ucraniano, Zelensky. Israel ha tratado de mantener los lazos con Rusia tras la invasión de Ucrania, sin embargo las palabras del funcionario ruso indignaron al pueblo israelí.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, aseguró que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, se disculpó con Israel durante una reciente conversación telefónica. Bennett dijo que aceptó la disculpa y agradeció a Putin por aclarar su posición.
“El primer ministro aceptó las disculpas del presidente Putin por los comentarios de Lavrov y le agradeció por aclarar su actitud hacia el pueblo judío y la memoria del Holocausto”, dijo la oficina de Bennett en un comunicado.
Sin embargo, en un informe del Kremlin sobre llamada entre ambos líderes, que se produjo cuando Israel cumplió 74 años desde la creación del estado judío, no mencionó una disculpa de Putin aunque sí detalló que discutieron la «memoria histórica» del holocausto.
Así lo aseguró el primer ministro israelí, Naftali Bennett, que dijo que conversó telefónicamente con el líder del Kremlin, a quien pidió que permita la evacuación del planta siderúrgica de Azovstal, fuertemente sitiada por las tropas rusas en el puerto ucraniano de Mariúpol.
Putin respondió que permitiría las evacuaciones, pero también exigió la rendición de las tropas ucranianas que resisten allí.
