En un contexto del aumento de la represión en ese país, la Junta Militar de Myanmar declaró este lunes que había ejecutado a cuatro activistas por la democracia acusados de ayudar a llevar a cabo «actos terroristas». Se tratan de las primeras ejecuciones de la nación del sudeste asiático en décadas, provocando una condena generalizada entre la población.
Los cuatro hombres, condenados a muerte en enero en un juicio a puerta cerrada, habían sido acusados de ayudar a las milicias a luchar contra el ejército que tomó el poder en un golpe de Estado el año pasado y desató una sangrienta represión contra sus opositores.
El Gobierno de Unidad Nacional de Myanmar, una administración en la sombra proscrita por la junta militar en el poder, condenó las ejecuciones y pidió una acción internacional contra la junta de Myanmar.
«Extremadamente entristecidos… condenamos la crueldad de la junta…», dijo a Reuters el portavoz de la oficina del presidente del NUG, Kyaw Zaw, a través de un mensaje. «La comunidad mundial debe castigar su crueldad».
Entre los ejecutados se encuentran Kyaw Min Yu, una figura de la democracia más conocido como Jimmy, y el exdiputado y artista de hip-hop Phyo Zeya Thaw, según el periódico Global New Light of Myanmar. Los otros dos ejecutados eran Hla Myo Aung y Aung Thura Zaw.
«Estoy indignado y devastado por la noticia de la ejecución por parte de la Junta de patriotas de Myanmar y defensores de los derechos humanos y la democracia«, declaró Tom Andrews, relator especial de la ONU sobre los derechos humanos en Myanmar, en un comunicado.
Los medios de comunicación estatales de Myanmar informaron este lunes de que las ejecuciones habían tenido lugar y el portavoz de la junta, Zaw Min Tun, confirmó posteriormente las ejecuciones a Voice of Myanmar. Ninguno de los dos dio detalles sobre cuándo se produjeron las ejecuciones.
Un grupo activista, la Asociación de Asistencia a los Presos Políticos (AAPP), dijo que las últimas ejecuciones judiciales de Myanmar se produjeron a finales de la década de 1980.
