No ha demorado ni un día Rusia en volver a las acciones bélicas en el puerto de Odesa, en el sur de Ucrania, tras el punto final al acuerdo de exportación de granos del Mar Negro, que garantizaba las operaciones con destino principal a China, Turquía y España.
Por segunda noche consecutiva, la fuerzas rusas lanzaron un ataque masivo contra la terminal portuaria y las edificaciones adyacentes dejando un manto de destrucción que no ha permitido por el momento establecer un número de víctimas fatales y heridos, o cuantificar los daños.
Las autoridades ucranianas calificaron como “infernal” el bombardeo. “Fue muy poderoso, verdaderamente masivo», aseguró al respecto Serhi Bratchuk, portavoz de la administración militar de Odesa, a través de Telegram.
Las acciones responden a la reciente explosión que derrumbó parte del Puente de Crimea este lunes, hecho que Moscú calificó como un “atentado terrorista” y por el que culpó a Ucrania. Ese ataque, que dejó dos muertos, fue clave para que Rusia diera automáticamente de baja el acuerdo del Mar Negro, que llevaba meses de intensas negociaciones.
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La decisión de Vladimir Putin de retirarse de ese acuerdo, afirma la ONU, podría causar una hambruna mundial, ya que impide la salida de granos desde Ucrania, uno de los principales exportadores. Aunque Ucrania, con el apoyo de la OTAN, está buscando vías alternativas para que los buques operen, el Kremlin ha dejado en claro que la seguridad de los mismos no está garantizada, e incluso advirtió que podría tomarlos como objetivo militar si no cuentan con el aval ruso.
La respuesta al golpe contra el abastecimiento de Crimea, Rusia no solo atacó Odesa: toda Ucrania estuvo en alerta durante la madrugada del miércoles por las incursiones de drones rusos, mientras sus fuerzas llevan adelante una fuerte contraofensiva que ya le permitió recuperar parte importante del territorio ocupado.
«Una noche difícil de ataques aéreos para toda Ucrania, especialmente en el sur, en Odesa», afirmó Serhi Popko, jefe de la administración militar de Kiev, quien reconoció que los drones llegaron a provocar daños.
Por el momento, el Kremlin no se pronunció sobre el ataque masivo contra Odesa, pero los blogueros militares afines a Putin aseguraron que se realizaron con una combinación de misiles y aviones no tripulados.
DOS «ATAQUES» EN CRIMEA
Mientras tanto, luego de la explosión en el puente, otros dos ataques se habrían producido en Crimea, ocupada por Rusia y anexada en 2014, de acuerdo a lo informado este miércoles por los medios y las autoridades locales. En ambos casos, se trataría objetivos militares.
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En primer lugar, se habrían registrado explosiones en el campo de entrenamiento militar de Krinichki. Y, además, se verificó un incendio en los del distrito de Kirovske, lo que obligó a cerrar la autopista de Tavrida, según lo contó el gobernador de Crimea, Serguéi Aksionov.
(Con información de Reuters)
