Rusia y Estados Unidos mantendrán conversaciones el próximo 10 de enero en Ginebra con respecto a las tensiones en Ucrania y los temores sobre la seguridad en Europa.
El acuerdo de discusión se da tras las exigencias rusas para limitar la influencia occidental en sus fronteras.
“El 10 de enero será el día principal de las consultas bilaterales ruso-estadounidenses”, declaró el viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Riabkov, a la agencia de prensa Tass.
No obstante, agregó, no se espera que se llegue a un acuerdo “en un solo día”.
La relación entre Estados Unidos y Rusia se ha fracturado en los últimos días debido al despliegue de tropas rusas en la frontera ucraniana, lo que ha asentado la posibilidad de una nueva invasión por parte de las fuerzas comandadas por Vladimir Putin.
Ahora, ambos países establecerán conversaciones en Suiza con el fin de clarificar las exigencias de Rusia por sesgar la influencia occidental en sus líneas fronterizas, así como garantizar un cierto nivel de seguridad en Europa.
De acuerdo con fuentes del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, habrá una reunión posterior entre Rusia y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
En tanto, Rusia reveló que tomará decisiones con base en el avance del organismo y que exigirá a la alianza militar transatlántica que niegue la posible expansión hacia sus fronteras y detenga cualquier respaldo militar en la zona de influencia de la capital rusa.
De igual forma, el 13 de enero se espera otra reunión entre la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y Rusia.
Uno de los portavoces del órgano mencionó que “la primera reunión de 2022 del Consejo permanente de la OSCE tendrá lugar el 13 de enero”.
Por su parte, Zbigniew Rau, ministro polaco de Asuntos Exteriores y nuevo presidente en funciones de la OSCE, indicó que se referirá específicamente al “Consejo que se reúne cada semana y congrega a los 57 estados participantes de la OSCE, incluidos Estados Unidos y Rusia”.
También, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos concretó: “Cuando nos sentemos a discutir Rusia podrá poner sus inquietudes sobre la mesa y nosotros pondremos las nuestras, especialmente las actividades en Rusia”.
En cuanto a la posibilidad de un evento bélico, Moscú ha negado cualquier plan de acción de este tipo en Ucrania. Al contrario, se denomina como la víctima de las “provocaciones” sucedidas en Occidente, que apoya las políticas y actividades militares ucranianas.
Por su parte, Vladimir Putin, presidente ruso, ha manifestado que estaría dispuesto a tomar medidas “militares y técnicas” en caso de que sus reivindicaciones sean ignoradas.
Publicado en cooperación con Newsweek