El líder de Hayat Tahrir al-Sham (HTS), Abu Mohammed al-Jolani, el grupo que derrocó del poder a Bashar al Assad en Siria, mantuvo un encuentro con el enviado de las Organizaciones Unidas (ONU), Geir Pedersen.
Según un comunicado, ambos conversaron sobre «los cambios que han ocurrido en la escena política que hacen necesario actualizar» una disposición del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de 2015 y «adaptarla a la nueva realidad».
El HTS de Jolani tiene sus raíces en la rama siria de Al-Qaeda, el Frente Al-Nusra, considerada como una organización «terrorista» por distintos gobiernos de Occidente.
La Resolución 2254 de 2015 del Consejo de Seguridad de la ONU determina una hoja de ruta para un acuerdo político en Siria, y también refiere al nombramiento de Nusra como «terrorista».
El martes, Pedersen admitió que el hecho de que Nusra haya sido clasificada por el Consejo de Seguridad de la ONU como organización terrorista era «obviamente un factor que complicaba» los esfuerzos para llegar a un convenio.
No obstante, hizo hincapié en que HTS, rompió con Nusra en 2016.
Ante ese contexto, llamó a llevar adelante un «proceso político que incluya a todos los sirios».
Y explicó que «ese proceso obviamente necesita ser liderado por los propios sirios” con «ayuda y asistencia» del resto del mundo.
Por su parte, Jolani puso el foco en «la necesidad de centrarse en la unidad territorial siria, la reconstrucción y el logro del desarrollo económico».
Y remarcó «la importancia de proporcionar un entorno seguro para el retorno de los refugiados y brindar apoyo económico y político para esto».
Más de un millón de personas abandonó Siria desde el derrocamiento de Bashar Al-Assad, según la ONU